El hecho de despertar una vez durante la noche para orinar es normal, no indica ningún problema de salud. No obstante, si te levantas varias veces en la madrugada para hacer pis, debes consultar a un médico y realizar exámenes para descartar o confirmar posibles enfermedades.
De manera obvia, el consumo excesivo de agua pocas horas antes de acostarse hará que despiertes para ir al baño, pero si no tienes ese hábito y aún así necesitas levantarte en medio de la noche sólo para orinar, debes investigar si no padeces una afección grave en los riñones o la vejiga.
¿Qué podría ser?
Vejiga hiperactiva: es más común entre las mujeres, la condición es causada por cambios en los nervios de la vejiga que pueden ser el resultado de condiciones neurológicas, irritación de las vías urinarias, entre otras causas.
Problemas de próstata: las condiciones que afectan a la próstata suceden de manera más frecuente entre los hombres de edad avanzada y puede resultar en excesivas ganas de orinar con pocos resultados (orina escasa). Esto ocurre por la presión sobre la uretra y el "compromiso" psicológico del vaciamiento completo de la vejiga.
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Insuficiencia renal: la condición se caracteriza por la pérdida lenta e irreversible del funcionamiento de los riñones. Cuando estos órganos dejan de funcionar en totalidad, el paciente pasa a depender de la diálisis o de un trasplante de riñón.
Infección en el tracto urinario: la condición (bastante común entre las mujeres) aumenta la voluntad de orinar debido al dolor o la sensación de ardor en la uretra. No es nada que un antibiótico no pueda solucionar, pero si no se atiene a tiempo la infección puede extenderse a otros órganos u ocasionar que la uretra se cierre como mecanismo de defensa.
Problemas circulatorios: cuando la circulación sanguínea o el corazón no funcionan de manera eficiente, el organismo tiende a acumular más fluidos, especialmente durante el sueño. La condición por lo tanto, aumenta la frecuencia de idas al baño para orinar.
Diabetes: las altas tasas de glucosa en la sangre (siempre presentes en este padecimiento) hacen que el paciente sienta mayor necesidad de beber agua. Consecuentemente eso aumenta la voluntad de orinar a todas horas.
Debido a lo anterior, es indispensable vigilar si la sed percibida durante el día es normal. Sentir la boca seca de manera usual, puede ser uno de los primeros signos de diabetes.
