Denver (EE.UU.), 2 ene (EFE).- Un pastelero que se hizo conocido por negarse en 2012 a preparar un pastel de bodas para una pareja gay, en un caso que llegó al Tribunal Supremo de EE.UU., demandó hoy al estado de Colorado por "castigarle" tras haberse negado esta vez a preparar una tarta para una persona que cambió de género.
Ante una corte federal en Denver, los abogados de Jack Phillips presentaron una demanda contra el estado para "detener nuevas acciones" estatales en su contra y que calificaron de "hostilidad", luego de que las autoridades locales aceptasen una demanda presentada contra Phillips por la persona que cambió de sexo.
Los abogados de Phillips, miembros del grupo conservador cristiano Alianza de Defensa de la Libertad (ADF, en inglés), afirmaron que la segunda demanda contra Phillips fue "una obvia trampa" y que el "estado de Colorado no le permite (a Phillips) seguir con su vida".
Sobre esa base, los abogados pidieron que la justicia federal deje sin efecto la segunda demanda, pero el juez a cargo del caso dijo que la demanda continuará hasta que él emita una opinión por escrito sobre el pedido de Phillips.
La demanda surgió luego de que Phillips se negase a aceptar el pedido de un pastel para Autumn Scardina, una mujer transgénero que solicitó esa tarta, azul adentro y rosado afuera, para celebrar su cambio de sexo.
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Los abogados de Phillips sostuvieron no que puede considerarse como una simple coincidencia el hecho que Scardina hizo su pedido el mismo día (4 de junio de 2018) que la Corte Suprema de Estados Unidos emitió su fallo que fue considerado como una victoria (al menos parcial) para Phillips.
El Supremo había intervenido como resultado de un proceso judicial que comenzó en 2012, cuando Phillips rechazó preparar un pastel para la boda de Charlie Craig y Dave Mullins.
Según la Corte Suprema, la Comisión de Derechos Civiles de Colorado (CCRD) actuó en su momento con "tendencias antirreligiosas" al sancionar a Phillips. Pero la corte no dijo nada sobre la posibilidad de que un negocio no reciba a clientes LGBTI por las creencias religiosas del dueño del negocio.
La fiscal estatal, Cynthia Coffman, pidió que la demanda presentada por Phillips quede sin efecto porque el nuevo caso (Scardina) no se basa en las creencias religiosas de Phillips.
Se espera que en febrero próximo el juez Wiley Y. Daniel dé a conocer su dictamen sobre el pedido de Coffman y que también decida si el veredicto de junio pasado del Supremo se aplica o no al nuevo caso.