Uno de los momentos que más se recuerda dentro del juicio en contra de Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera en la Corte Federal de Brooklyn fue cuando el juez le negó la petición de abrazar a su esposa, Emma Coronel Aispuro, quien ha asistido a casi todas las audiencias, y entre los dos no ha existido contacto físico desde que el capo fue extraditado a Estados Unidos, en enero de 2017.
Las estrictas condiciones de encierro que debe seguir el fundador del Cártel de Sinaloa incluyen también el no poder hablar por teléfono. Sin embargo, el juez que lleva la causa de Guzmán Loera, Brian Cogan permitió una forma de comunicación para el matrimonio y es a través del envío de cartas.
De acuerdo con medios de comunicación estadounidenses, desde hace meses la pareja se comunica a través de cartas que son revisadas exhaustivamente y leídas por las autoridades del Centro Correccional Metropolitano, al sur de Manhattan, donde fue encerrado el capo desde su llegada a Estados Unidos.
Sus palabras también están restringidas ya que en sus misivas sólo puede escribir sobre temas en común, como sus hijas, cosas relacionadas con los abogados del caso, pero nada que pudiera parecer sospechoso para quienes revisan la correspondencia.
Cuando la defensa de Guzmán Loera en EE.UU. intentó reducir las restricciones de confinamiento en las que permanece el capo, pidió que pudiera mantener contacto con la ex reina de belleza, sin embargo, Cogan argumentó que no se podía pasar por alto que se había fugado dos veces de cárceles de alta seguridad en México, por lo que sus vistas se limitaron a las de sus abogados y las de sus dos hijas pequeñas producto de su relación con Coronel Aispuro.
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"Al Tribunal le resultaría muy difícil no reconocer que la segunda fuga de un centro de máxima seguridad en México, ampliamente divulgada por el acusado, se realizó bajo la vigilancia por video de 24 horas en aislamiento", escribió Cogan en su fallo, según el diario La Opinión.
La intención de la revisión es tener la certeza de que no se envían mensajes codificados a través de los cuales se estuviera planeado una nueva fuga o dirigir algún tipo de agresión contra los testigos.
Guzmán Loera ha demostrado ser aficionado a la escritura de cartas y de mensajes de texto, como ha quedado demostrado en el juicio, donde se presentaron cartas que envió a su ex amante Lucero Guadalupe Sánchez.
Por otro lado, sus mensajes de texto con una de sus ex amantes, Zulema Yulia Hernández, con quien tuvo un romance mientras los dos estaban presos en la cárcel de máxima seguridad de Puente Grande Jalisco.
En tanto, su actual pareja, Emma Coronel, a través de su cuenta de Instagram le envió la semana pasada un mensaje al capo en el que hacía referencia a los años que tenían juntos "no me pueden vender otra versión de Joaquín y aunque hace mucho tiempo que no tenemos contacto, mi esposo sabe lo mucho que lo quiero y siempre contó, cuenta y contará conmigo", señalaba en uno de sus párrafos.