Muchas comunidades del sur de Estados Unidos podrían enfrentar semanas de inundaciones y otros problemas por el desborde de varios ríos a causa de las recientes lluvias.
El alcalde de una localidad ubicada en el delta del Mississippi afirmó el miércoles que todos los caminos quedaron inundados, excepto uno, y que algunos residentes se vieron obligados a huir. El agua se estaba acumulando en un dique de Mississippi y podría provocar inundaciones sin precedentes, informo El Nuevo Herald.
Mientras que en Nueva Orleans, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos abrió un desagüe para aliviar la presión.
Casi todo el estado de Tennessee ha recibido entre 25 y 51 centímetros (10 a 20 pulgadas) de lluvia en lo que va del mes, informó el Servicio Nacional de Meteorología. El Departamento de Transporte del estado estaba construyendo carriles temporales sobre la autopista interestatal 25, cerca de Nashville, luego de que el sábado un deslave provocó el cierre de los carriles con dirección al este. El miércoles, las autoridades calcularon que hay entre 800 y 900 residencias inundadas dentro y en los alrededores de Knoxville.
El río Tennessee llegó al borde el miércoles en Perryville, Tennessee, registrando su tercer nivel más elevado de la historia. Varias construcciones a un costado del río se encuentran sumergidas en distintas localidades, y se cortó el suministro de agua potable en algunas zonas.
“Las personas van a quedar horrorizadas cuando el agua desaparezca”, comentó el alcalde del condado Hardin, Kevin Davis, al periódico Jackson Sun.
Se pronostica que el río Ohio se desborde este fin de semana en Cairo Illinois, también en su tercer nivel más alto de la historia. Y río abajo continuarán las inundaciones, con desbordes en Vicksburgh, Mississippi, y en otras partes, hasta mediados de marzo.
En Glendora, Mississippi, los 151 habitantes quedaron atrapados entre las aguas desbordadas del río Tallahatchie y Black Bayou. El agua está a unos centímetros de cubrir la carretera federal 49, el único camino hacia la localidad que no está inundado.