Tras anunciar hace un mes un comité exploratorio, la senadora demócrata por Nueva York Kirsten Gillibrand despejó hoy todas las dudas al lanzar, oficialmente, su candidatura a la presidencia de Estados Unidos en 2020.
Gillibrand, de 52 años, engrosa así un grupo diverso de aspirantes de la fuerza azul, que buscan la nominación del partido para competir con Donald Trump, quien desde su discurso al ganar las elecciones en noviembre de 2016 advirtió que pretendía un segundo mandato.
El anuncio circuló este domingo en un audiovisual producido por su campaña, en el cual ella dice que el himno nacional plantea la pregunta: '¿Ganará el valiente?'
'Bueno, no siempre ha pasado, y no lo es en este momento', afirmó y más adelante enfatizó que 'el valiente no enfrenta a las personas unas contra otras. El valiente no pone dinero sobre vidas. El valiente no propaga el odio. Esconde la verdad. Construye un muro. Eso es lo que hace el miedo'.
Al menos seis mujeres decidieron hasta el momento entrar en la carrera por llegar a la Casa Blanca y romper el 'techo de cristal', como suelen llamar en Estados Unidos a la brecha invisible que impide a las féminas acceder a los mismos puestos de poder que los hombres.
Gillibrand -que ocupó la vacante dejada por Hillary Clinton en el Senado en 2009, cuando pasó a secretaria de Estado-, ha recibido atención nacional en los últimos años, en gran parte debido a su activismo en el movimiento #MeToo, en defensa de las víctimas de agresión sexual.
No hace mucho enfrentó críticas de otros demócratas cuando se convirtió en la primera senadora de su partido en pedir la renuncia de un correligionario en la Cámara Alta, Alan Franken (Minnesota), por acusaciones de conducta sexual inapropiada.
Según el diario The Hill, la agenda con la que Gillibrand espera atraer votantes incluye, entre otros temas, la propuesta de atención médica universal, licencia familiar con sueldo y poner fin a la violencia con armas de fuego.
Desde que la también abogada dio a conocer su comité exploratorio, recorrió diferentes estados de la Unión, donde ha ratificado una postura antiTrump.
Con este paso, Gillibrand se suma a las pretensiones de Kamala Harris (California), Elizabeth Warren (Massachusetts), Amy Klobuchar (Minnesota), la representante por Hawai Tulsi Gabbard y la consejera espiritual, Marianne Williamson, quienes tratarán de que el Presidente número 46 del país en 2020 lleve faldas.