Un hombre que pateó y degolló a su esposa porque se negó a tener intimidad con él, murió en la prisión donde se encontraba a la espera de su sentencia.
La Oficina de Asuntos Exteriores de la Mancomunidad de Naciones del Reino Unido confirmó que el cadáver del británico Kevin Smitham, de 51 años, fue encontrado en la base de la prisión central de Ubon Ratchathani, al sureste de la región de Isan, en Tailandia.
Smitham, natural de Nottingham, mató a su cónyuge Kandra Smitham, de 29 años, el 15 de abril del año pasado. La policía llegó y encontró el cuerpo —“desnudo y con signos de violencia extrema”— en el suelo, frente a la casa familiar.
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La pareja, que tenía dos hijos pequeños, había viajado a Tailandia para participar del Songkran, la fiesta del año nuevo de Tailandia.
El cadáver estaba envuelto en una manta. Tras el hallazgo, Kevin Smitham fue arrestado y mantenido bajo custodia desde entonces, pero hace unas semanas fue descubierto “con lesiones fatales” en las instalaciones de la prisión. Murió más tarde, cuando iba a ser trasladado a un hospital local.
Kandra Smitham, víctima del feminicidio, era una conocida ‘influencer’ del mundo fitness cuya página de Facebook tenía más de 28,000 seguidores.
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“Durante una cena en abril del año pasado, ella empezó a discutir con su esposo porque quería tener relaciones sexuales. Se negó y esto causó celos. Pensó que la esposa había estado cortejando a otros hombres”, detalló el parte policial.
El Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que se encuentra realizando gestiones en Tailandia para repatriar el cuerpo del autor del feminicidio.
