Hace un año, los grupos delincuenciales de la oposición promovieron violencia, destrucción y muerte en diversos departamentos de Nicaragua.
Matagalpa y Jinotega fueron de los más afectados por el actuar de estos grupos. Recordemos cuáles fueron las principales afectaciones y cómo se ha venido trabajando en restaurar y garantizar la paz que impulsa el desarrollo.
Destrucción en Matagalpa
La mañana del 25 de junio, los grupos delincuenciales vandalizaron y quemaron las instalaciones del plantel de Matagalpa, a días de haberse tomado ese lugar. Lo más grave fue la destrucción de toda la maquinaria utilizada para brindar servicios a la población.
"Destruyeron todo lo que es el mobiliario, las computadoras, las mesas. Luego procedieron a lo que fue la destrucción y saqueo de toda la maquinaria que estaba aquí en ese momento, en las instalaciones, las cuales quedaron en chatarra, prácticamente solo dejaron el cascarón", dijo Lawrence Valle, director de infraestructura vial de la Alcaldía de Matagalpa.
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Una de las pocas máquinas que no fue destruida, se utilizó para aterrorizar a las familias, tratando de destruir casas como la de un conocido militante sandinista, don Lalo Soza, quien se oponía a los tranques en su barrio. Valientemente resistió el ataque.
"Nos comenzaron a botar la casa, eran como unos 180 ó 200 elementos y nosotros éramos 6. Yo soy naturalizado americano y he vivido por 20 años en Estados Unidos y desde el principio de este Golpe yo vi la desinformación, la guerra mediática de los medios de la derecha, cómo desinformaban a los nicaragüenses y a la opinión internacional. La policía estaba acuartelada cuando yo vine y ya miramos a los vándalos con armas de cacería, machetes, drogados. Aquí el que quería salir por la carretera tenía que pagar una cuota", recordó el ciudadano, Luis Eduardo Soza.
Las entradas y salidas de la ciudad estuvieron tomadas durante varias semanas, lesionando el derecho a la libre movilización de la población, que también fue sometida a torturas, ya que muchos fueron capturados, desnudados y pintados de azul y blanco. Otros fueron asesinados por pensar diferente.
"Perdimos a cuatro compañeros que eran trabajadores de las diferentes alcaldías y también fueron compañeros nuestros secuestrados y torturados; los trabajadores de las alcaldías fueron perseguidos", detalló Giomar Irías, presidenta de INIFOM.
Programa en honor a Winder Reyes
A un año de esos lamentables hechos, las calles de Matagalpa han sido completamente rehabilitadas y la población puede movilizarse libremente en paz y seguridad. Los proyectos no se han detenido y honran a quienes perecieron a manos de los vandálicos, como el trabajador de la Alcaldía, Winder Reyes, en cuyo honor se desarrollará un programa de lotes para familias de escasos recursos.
"Son 2 mil lotes para 2 mil familias, donde van a tener un costo de entre 20 a 30 dólares la mensualidad por 6 años. ¿Qué caro puede ser eso? Esto va a llevar agua potable, alcantarillado sanitario, lleva un centro de salud, 2 canchas: Una para básquetbol y otra para fútbol sala. ¿A dónde se había visto esto? ", expresó el ciudadano Marlon Artola, del barrio Walter Mendoza.
Se ha realizado importantes inversiones para poco a poco ir reemplazando la maquinaria destruida por los grupos delincuenciales, incluso las oficinas del plantel de la Alcaldía ya están listas para ser reinauguradas, demostrando la victoria del pueblo sobre la intentona golpista.
"Trabajamos en la limpieza donde había los obstáculos, trabajamos en la reconstrucción de las calles, trabajamos en función de reactivar toda la dinámica económica y social", comentó el secretario político de Matagalpa, Pedro Haslam.
Los daños en este departamento se calculan en unos 147 millones y medio de córdobas. El principal compromiso ahora es el de mantener la paz y seguir trabajando por la población de la mano del Gobierno Nacional.
Vandalismo en Jinotega
En Jinotega el daño de los grupos vandálicos fue principalmente destruyendo las calles, sitiando a pobladores y utilizando barricadas de adoquines para promover la violencia y muerte.
"Todo el mes de junio y julio fue de un total bloqueo en las calles, en total se afectaron 77 calles", cuantificó Oliver Castro, director de proyectos de la Alcaldía de Jinotega.
También fueron afectados los comerciantes, quienes por temor a esos brotes de violencia y tras ser amenazados por los llamados “pacifistas”, debieron dejar cerrados sus tramos y el mercado fue paralizado por casi 2 meses. Uno improvisado fue montado en el sector de San Antonio para que pudieran llevar el sustento a sus hogares.
"La gente para evitar ser ultrajada, ser golpeada, se tuvo que replegar a sus diferentes lugares y dejar los negocios abandonados", rememoró Leonardo Pérez, dirigente de los comerciantes.
Paz en la Ciudad de las Brumas
Hoy en la Ciudad de las Brumas se respira paz. Las calles que fueron destruidas por los llamados "pacifistas" han sido reconstruidas.
"Iniciamos inmediatamente a reconstruir las calles y ya hoy tenemos un 100% de las calles reconstruidas, reparadas y rehabilitadas", destacó Giomar Irías.
En el mercado se han realizado mejoras que han restablecido la actividad comercial y se han fortalecido alianzas para ayudar al dinamismo de este visitado punto de la ciudad.
"Hemos logrado entender y la gente entiende que no se puede cerrar un mercado, no se puede violentar el derecho a trabajar de los comerciantes", opinó el comerciante Marvin Ruiz.
Pese a todo el trabajo que se ha desarrollado para reconstruir lo que había sido dañado, los proyectos y programas no se han detenido: Agua potable, mejoramiento de calles y mantenimiento de caminos productivos son evidencia de un pueblo que quiere seguir progresando en victorias, derrotando la violencia y muerte.
"Inmediatamente después comenzamos a reconstruir las calles e iniciamos un plan de reparación de caminos, estamos construyendo un parque de 42 millones de córdobas; es decir que no nos hemos detenido de seguir trabajando, prosperando, desarrollando obras a favor de las familias de Jinotega", puntualizó Leónidas Centeno, alcalde Jinotega.
El trabajo por la paz no se detiene. El compromiso de las autoridades junto a las familias es garantizar la convivencia en tranquilidad y libertad de un pueblo victorioso, que derrotó a los malos hijos de la patria.