Biden anunció la tercera candidatura presidencial de su carrera a través de un video en YouTube y otras redes sociales. Se espera que haga su primera aparición pública como candidato el lunes en un evento en Pittsburgh con miembros del sindicato, un distrito electoral clave.
Biden, de 76 años, había estado luchando durante meses sobre si correr o no. Su candidatura enfrentará numerosas preguntas, incluso si es demasiado viejo y demasiado centrista para un Partido Demócrata que anhela caras nuevas y cada vez más propulsado por su ala liberal.
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Aún así, comienza como el líder de la manada en las encuestas de opinión de un campo demócrata que ahora sumará 20 candidatos que buscan la oportunidad de desafiar al presidente Donald Trump, el probable candidato republicano, en noviembre de 2020.
Los críticos dicen que su posición en las encuestas es en gran medida una función de reconocimiento de nombre para el exsenador estadounidense de Delaware, cuyas más de cuatro décadas en el servicio público incluyen ocho años como el número 2 del Presidente Barack Obama en la Casa Blanca.
A medida que aumentaba la especulación sobre su oferta, Biden se enfrentó a nuevas preguntas sobre su propensión por mucho tiempo a tocar y besar a extraños en eventos políticos, y varias mujeres se adelantaron para decir que los había hecho sentir incómodos.
Biden tuvo problemas en su respuesta a las preocupaciones, a veces bromeando sobre su comportamiento. Pero en última instancia, se disculpó y dijo que reconocía que los estándares de conducta personal habían evolucionado a raíz del movimiento #MeToo.
Trump y sus aliados se apoderaron de la solapa, intentando debilitar a su mejor rival antes de que Biden entrara en la carrera.
Aun así, Biden estaba decidido a seguir adelante, argumentando que sus antecedentes, experiencia y currículum lo posicionaron mejor para enfrentar a Trump el próximo año.
En un discurso a los miembros del sindicato en abril, Biden dijo que Trump era una "tragedia en dos actos".
