Un niño de dos años casi fue hervido vivo después de caer accidentalmente en una olla de agua hirviendo en Ucrania .
El pequeño Ivan Maletych está luchando por su vida después de sufrir horrendas quemaduras en el 70 por ciento de su cuerpo en el pueblo de Susidovychi, en la región de Lviv Oblast, en el sur de Ucrania.
Una foto desgarradora tomada por un voluntario del hospital muestra a Ivan acostado en la cama cubierto de vendas después de ser hospitalizado.
Se dice que el incidente ocurrió cuando la madre del niño Ivanna Maletych iba a lavar algo de ropa.
Calentó el agua en una olla de 40 litros (35 cuartos de galón), luego la puso en el piso de la cocina de su casa y fue a una tienda de comestibles a comprar pan, según los informes.
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La señora Maletych, madre de cuatro, dijo a los medios locales: "Ivan estaba jugando en la casa mientras su hermano mayor miraba dibujos animados".
"Creo que entró en la cocina y accidentalmente cayó en la olla de agua hirviendo.
'Mi esposo estaba en el patio cerca de la casa. Escuchó gritos y corrió hacia nuestro hijo".
En la cocina, el señor Maletych se dio cuenta inmediatamente de lo que había sucedido. Le quitó la ropa de Ivan y roció al niño con agua fría, dijo la madre.
Iván fue trasladado a la ciudad de Lviv, la capital de la región, e ingresó en la unidad de cuidados intensivos. Le diagnosticaron quemaduras graves en el 70 por ciento de su cuerpo, incluidas quemaduras de cuarto grado.
Una foto tomada en el hospital muestra a Iván acostado en la cama cubierto con vendas empapadas de sangre.
Los médicos del hospital Lviv Burn Center están luchando para salvar la vida del niño, pero no han especulado sobre sus posibilidades de supervivencia.
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Victor Pyzhevsky, el jefe de policía del departamento de emergencias del hospital, dijo: 'El niño se encuentra en una condición crítica. Está recibiendo ventilación mecánica"
Ivanna Maletych, que está en el hospital con su hijo, dijo: 'Estoy constantemente en el hospital con mi hijo.
'Los médicos no dicen nada sobre sus posibilidades de supervivencia.
"Mi corazón está roto y no puedo perdonarme por lo que pasó".
La policía está tratando el caso como un accidente.
