El joven que acusó a Kevin Spacey de abuso sexual abandonó esta semana la demanda civil que había presentado contra el actor, justo antes de una nueva audiencia de la demanda penal que podría ser problemática para la acusación.
Este “abandono voluntario” se registró en el tribunal de la exclusiva isla de Nantucket, Massachusetts, donde tuvo lugar la supuesta agresión en julio de 2016.
No hubo explicaciones acerca de las razones de ese abandono. Pero ocurre pocos días antes de que se realice el lunes una nueva audiencia penal con Spacey, exprotagonista de la exitosa serie “House of Cards”, que puede resultar complicada para la fiscalía.
Una parte de su expediente se basa en imágenes grabadas con el celular de la presunta víctima, William Little, quien tenía 18 años en el momento y trabajaba como camarero en un restaurante de esta isla, muy popular en verano entre el jet set.
Las imágenes supuestamente muestran a Spacey metiéndole la mano en el pantalón, pero este teléfono, al que la defensa pide acceder, está desaparecido.
Little dice que no lo volvió a ver después de entregarlo a la Policía para su revisión en diciembre de 2017.
La Policía asegura habérselo devuelto al padre de Little, pero éste replicó que “no lo recordaba”.
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Si no se entrega el dispositivo antes de la audiencia del lunes, el juez advirtió que citaría a Little para declarar sobre su desaparición.
Spacey, de 59 años, fue acusado formalmente en enero de varios cargos por el abuso sexual de un adolescente. Se declaró inocente y enfrenta hasta cinco años de prisión.
El caso enterró la carrera del dos veces ganador del Óscar, quien en la ola de denuncias alentadas por el movimiento #MeToo fue objeto de decenas de señalamientos de acoso y abuso sexual en Estados Unidos y Londres.
Como resultado de ello, fue sacado de la temporada final de “House of Cards” y de la última película de Ridley Scott, “Todo el dinero del mundo”, en la que fue reemplazado poco antes del estreno por Christopher Plummer.