En horas de la mañana de este martes se registró un cobarde asesinato, cometido por parte de cuatro sujetos de identidad aún desconocida en prejuicio Don Adrián Altamirano Cardenal de 62 años. El hecho ocurrió en una comunidad de Jinotega.
Este asesinato fue perpetrado cercano al centro de salud de Wiso, costado norte del Río Bocay, en la comunidad de Kudawas, perteneciente a la micro región de Ayapal, en el municipio de San José de Bocay, departamento de Jinotega.
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Hecho sangriento
Segun testigos, los hechos ocurrieron cuando la víctima Adrián Altamirano se dirigía en un bote en compañía de su hijo, Horacio Altamirano de 26 años, hacia la comunidad Kudawas sobre el Río Bocay, cuando en el transcurso de su viaje fue interceptado por cuatro sujetos que portaban pasamontañas y armas de fuego tipo corta.
Bajo intimidación bajaron a la víctima del bote, posterior se lo llevaron unos 80 metros al este, a la orilla del río y ahí mismo le realizaron tres disparos en la parte del pecho, falleciendo al instante en el mismo lugar. Después tiraron el cuerpo al río.
El "Curandero"
Pobladores relataron que Adrián Altamirano era conocido como un "Curandero" en su comunidad de Kudawas, y así mismo que a este se le acusaba de haber matado a varias personas hechizadas, o incluso hechizándolas, en esa comunidad, por tal razón la víctima había recibido amenazas de muerte.
Se presume que los sujetos que mataron al "Curandero" eran posibles pobladores de dicha comunidad, quienes decidieron haber tomado venganza por sus propias manos, ante la fama y acusación que Adrián tenía encima.
La Policía Nacional se encuentra investigando el caso para conocer todos los detalles que puedan esclarecer el caso, así mismo tras la identificación de los cuatros asesinos que cometieron el crimen, y de esta forma iniciar con la búsqueda para que éstos sean procesados por la ley.