En el sector de los tanques de MEBASA, durante los actos delictivos de opositores al Gobierno de Nicaragua en 2018, fue asesinado de manera cruel el teniente Gabriel de Jesús Vado Ruiz, cuando fue secuestrado e interrumpido su viaje hasta Carazo para ver a sus familiares.
Ha pasado un año pero la memoria del teniente Vado, un joven entregado a su trabajo, sigue presente en los corazones de cada nicaragüense que busca la paz.
Karla Teresa Torres, viuda de Vado, mencionó que "la verdad que él es mi pilar principal para salir adelante. Estar en este lugar es duro para mí, para la familia. Este lugar fue donde le cometieron las mayores atrocidades a él. La verdad que es un dolor tan grande que no se va a quitar nunca, jamás y yo lo único que pido que esto no se vuelva a repetir, para que familias no sufran así como nosotros. Es diario el sufrimiento".
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"Lo recuerdo como que fue hoy, ha pasado un año pero para mí no pasa, porque estoy muy dolida pero al mismo tiempo y recapacito y digo 'Señor mi hijo murió defendiendo su patria'. Yo digo me le hubieran quitado la vida pero me lo hubieran dejado para yo vestirlo. Mi hijo decía cuando yo me muera me voy a ir con mi uniforme puesto, él decía el hombre muere con las botas puestas. Me siento agradecida con todo este pueblo y policía que están acompañándonos en este acto", dijo Juana Ruiz, mamá del teniente Vado.
Homenaje a Gabriel de Jesús Vado Ruiz
Durante el acto de homenaje, las autoridades municipales realizaron puesta de ofrenda floral en el monumento que fue erguido en este lugar en honor al héroe de paz.
"Él era parte de la dirección antinarcótico de la Policía Nacional, ellos mismos tomaron los videos donde al final lo queman. Eso marcó un golpe para la opinión pública de Masaya, para la opinión pública de Nicaragua y la opinión pública internacional; ese acto terrorista y cobarde", fueron palabras del general Ramón Avellan, segundo jefe de la Policía Nacional.
"Este héroe de la paz y la seguridad muere en cumplimiento de su misión constitucional. Yo recordaba que para esos días no fue un solo policía que nos secuestraron, fueron varios policías que secuestraron por que visitaban a sus familiares, a sus madres, venían a dejar su salario", agregó Avellán.
Los uniformados destacaron que en nombre del teniente Vado seguirán forjando las rutas de seguridad que necesita Nicaragua para continuar velando por la paz de las familias y así llevar el progreso hasta los rincones de este país.
