El Embalse Apanás, mejor conocido como el Lago Apanás, ubicado en el municipio de Jinotega, fue creado en el año 1964 ante la necesidad de generar energía eléctrica en la zona. Este lugar siempre ha estado rodeado de misterios que han pasado de generación en generación.
Augusto Chavarría es un poblador de más de 70 años de esta zona, quien cuenta que "el terreno acá donde estamos son 12 mil manzanas de lago, de pura comunidad indígena, lo que es la comunidad de Los Robles, Pueblo Nuevo y Siles son tierras indígenas. Desde 1960 iniciaron las primeras intervenciones para llevar a cabo la construcción de este hermoso lago artificial, y fue hasta el '64 que se concretó el inicio de este proyecto".
Este lago con más de 55 años de existencia, más allá de ser un atractivo turístico, ha sido el escenario de cientos de muertes de personas que navegan las aguas de este lago tan bello y a la vez peligroso.
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La imprudencia, no usar chaleco salvavidas, accidentes acuáticos y el consumo de sustancias alucinógenas han sido algunas de las causas principales que han provocado las muertes de muchas personas en este lugar.
"El tiempo que tengo de vivir acá en esta zona son 25 años, las personas que acá se se han ahogado en este lago, han venido de otros lados a querer divertirse los pobrecitos. Qué es lo que pasó, que no conoce el terreno o como son de traicioneras las aguas. En (a) veces creen que entran en una parte seca y se van a las áreas más ondas, y es ahí donde llega el último día de ellos", expresó Aura Flores, pobladora del Lago de Apanás.
El mito de Apanás
Durante muchos años se mantiene latente una duda, y esa es ¿Cuál es el mito que rodea al Lago de Apanas?
Glenda Valles, pescadora de más de 10 años, dijo que ese mito que existe en el Lago de Apanás consiste en que "cuando aquí hay un ahogado, en ocasiones el lago se pone "oloso", se pone feo pues para navegar en él. Se pone fea y oscura, muy oscura el agua, entonces los cuerpos no salen a la superficie, sino que los cuerpos se hunden más".
A lo largo del tiempo han tenido casos de ciertas personas que han muerto ahogadas y que no logran ser encontradas por las autoridades correspondientes, es por esto que los pobladores acuden a la práctica de una famosa técnica en la zona conocida como "La Calabaza" o "El Guacalito".
Esteban Martínez, pescador, relató que cuando hay personas que se ahogan, "algunos salen a la superficie, otros no salen a la superficie, por lo que algunos se quedan trabados dentro del agua por un número de cosas (…) Por el lodo, ramas, o una piedra, entonces qué pasa, a veces ni el Ejército ni la Fuerza Naval logran encontrar los cuerpos, entonces a veces se ha ocupado una técnica que famosamente nosotros le llamamos como La Calabaza o El Guacalito".
"Una calabaza entera en algunos casos o una por la mitad, se le pone una candela por dentro, y donde ella va rotando, ella llega hasta el punto donde está el difunto, donde ella se mantiene estacionada; allí se encuentra el cadáver que anda buscando la Fuerza Naval, los bomberos o el Ejército", agregó el pescador.
Lo que se refiere la técnica de la calabaza es que este producto lo dejan flotando en este lago, con una candela en su interior, luego por el movimiento de las aguas, la misma se mueve hasta quedar estacionado en un punto específico del lago. Es en ese espacio que luego los buzos y expertos verifican si se encuentra el cadáver. Y en efecto, en muchas ocasiones, es el lugar preciso en que se encuentra el cuerpo.
Habrá acaso un verdadero misterio en este lago, o solo ha sido la imprudencia de quienes han muerto en estas aguas; lo cierto es que con la técnica de "El Guacalito" han logrado ser encontrados los cuerpos de más de 10 personas, según lo que dicen los pescadores.