Una desgracia: Menor muere tras quedar atrapado en llamas en Chinandega

Foto: Incendio mortal en una casa de Chichigalpa, Chinandega / TN8
Foto: Incendio mortal en una casa de Chichigalpa, Chinandega / TN8

Al hospital departamental de Chinandega, Dr. Mauricio Abdalah, ubicado en el municipio de El Realejo, fue llevado con quemaduras de hasta tercer grado el niño de iniciales J.A.H., de 4 años de edad, luego de quedar atrapado por las llamas que devoraron su humilde vivienda en el municipio de Chichigalpa. Horas después, se rindió a la muerte.

El siniestro fue reportado alrededor de las 04:20 de la madrugada del lunes 2 de diciembre de 2024, en la comarca Guanacastal, donde las unidades de bomberos sofocaron el incendio y brindaron atención prehospitalaria antes de trasladarlo al centro asistencial regional debido a la gravedad de las quemaduras.

Presuntamente, otros miembros de la familia también resultaron lesionados en el siniestro y fueron trasladados por su cuenta al hospitalito de Chichigalpa; ya que sus lesiones no eran tan graves como las del menor.

De manera preliminar, se maneja la información de que el siniestro ocurrió por el recalentamiento de un abanico, el cual se incendió y las llamas rápidamente se extendieron al resto de la vivienda, propiedad de Lázaro José Espinoza, de 31 años de edad.

Foto: Incendio mortal en una casa de Chichigalpa, Chinandega / TN8
Foto: Incendio mortal en una casa de Chichigalpa, Chinandega / TN8

Una verdadera tragedia en Chinandega

Además de la lamentable tragedia del niño, se suman los cuantiosos daños económicos en la infraestructura de la casa; pérdida de camas, abanico, zinc y otros enseres.

En estas fechas de fin de año, es de suma importancia revisar los sistemas eléctricos debido al alto consumo de energía que las familias suelen utilizar con luces navideñas; electrodomésticos como televisores, planchas, refrigeradoras, entre otros.

Asimismo, es fundamental recordar que a los niños no se les debe dar pólvora, ya que la mala manipulación de estos productos puede ocasionar graves peligros. Si se realiza su uso, debe ser bajo la supervisión de un adulto.