Kimberly Irías Reyes, de 30 años de edad, es la mujer señalada de haber rociado gasolina y luego prendido fuego a la vivienda de su cónyuge, Henry Heansky, la noche de este jueves 14 de noviembre, en el barrio Santa Rosa, Bluefields; detrás de la delegación policial.
» Ella discutió con mi hermano, le quitó el celular, estaba acá en la casa de mi mamá; luego se fue a la casa de mi hermano, y al venir de regreso la casa ya estaba en llamas «, fueron las palabras fuera de cámara de una hermana de Henry Heansky.
Pero Kimberly no fue nada lenta: antes de incendiar la vivienda, que dejó a Henry solo con lo que llevaba puesto, ella alistó y sacó sus pertenencias con la ayuda de un menor de edad, hijo de ella con una primera pareja. Esto quedó evidenciado en un video aficionado grabado por familiares del joven afectado.
Kimberly Irías Reyes no dudó en dejar sin vivienda a su hija menor de apenas un año y medio, que procreó con Henry. En cuestión de segundos desapareció con sus pertenencias, abandonando incluso a su hija con la familia del padre.
Familia y vecinos evitan tragedia mayor tras incendio en Bluefields
A duras penas y con sacrificio, Henry había construido la vivienda para garantizar un futuro a su hija. Sin embargo, los años de esfuerzo como pescador de jaiba quedaron reducidos a carbón y cenizas.
Fueron los mismos familiares del joven de 23 años, junto con vecinos, quienes lograron controlar el incendio que se podía observar desde otros barrios costeros de la ciudad de Bluefields. A punta de baldes con agua de la bahía y mangueras domiciliarias, lograron evitar que las llamas se propaguen a viviendas aledañas.
Minutos después se hicieron presentes los bomberos, quienes realizaron el escombreo, una técnica que asegura que todo quede realmente apagado.