Por segundo año consecutivo, aunque por diferentes razones, la reina Isabel II ha cancelado toda celebración pública ligada a su cumpleaños, este miércoles 21 de abril.
Si en 2020 la soberana consideró poco apropiado festejar su efeméride con motivo de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, con todo el Reino Unido sumido en un periodo de estricto confinamiento, en esta ocasión la monarca ha suspendido cualquier evento o gesto oficial debido a la reciente muerte de su esposo, Felipe de Edimburgo, cuyo funeral se celebró el pasado sábado en el castillo de Windsor.
De esta forma, el Ministerio de Defensa ha confirmado que no se lanzarán salvas de cañón desde la Torre de Londres y el también céntrico Hyde Park, como es tradicional ante una ocasión tan señalada, por deseo expreso de la jefa del estado, quien sigue oficialmente de luto tras el fallecimiento del duque.
Te puede interesar: Celebramos el Día internacional de Los Simpson con sus cinco mejores capítulos
Asimismo, los planes para revelar un nuevo retrato de Isabel II para marcar sus 95 años de vida han sido directamente suspendidos y trasladados a una fecha posterior, según ha informado el periódico Daily Mail.
Según fuentes del entorno del palacio de Buckingham, la soberana se limitará a congregar a sus familiares más cercanos para un almuerzo privado que tendrá lugar este miércoles en el castillo de Windsor, donde la reina ha permanecido recluida desde el inicio de la pandemia.
Por tanto, la única celebración pública que se producirá ese día tendrá como escenario los perfiles de la monarquía en las diferentes redes sociales, de las que se espera que se actualicen con felicitaciones e imágenes de la regia cumpleañera.