Abuelito es arrollado por un motociclista en Carazo

Foto: Tragedia en Carazo /TN8
Foto: Tragedia en Carazo /TN8

Una persona de la tercera edad resultó arrollada por un motociclista en un accidente de tránsito registrado en la carretera Panamericana Sur; en el municipio de Dolores, Carazo.

El hecho ocurrió la noche de este jueves, cuando Miguel Ángel Narváez Sandino, de 78 años y originario de Dolores; cruzaba la carretera Panamericana utilizando una silla de ruedas cuando fue arrollado por el motociclista.

 

Tomasa Martínez, esposa de la víctima, comentó que él había salido a comprar hielo y frijoles, que quedaron esparcidos sobre la pista tras el impacto. “Él venía volando, venía tirado, por eso lo golpeó”; dijo refiriéndose al motociclista.

Agregó que don Miguel Ángel Narváez Sandino había tenido un accidente reciente, había caído y, debido a esto, utilizaba la silla de ruedas para apoyarse y poder moverse en el momento del accidente.

Foto: Tragedia en Carazo /TN8
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Tragedia en Carazo

Presuntamente, el conductor de una camioneta le había cedido el paso a don Miguel Ángel, pero el motociclista no lo vio y lo levantó en el aire.

El motociclista, identificado solo como Gerald, quien conducía una motocicleta roja con placa M 234800; comentó que al momento del accidente venía de su trabajo.

Al llegar a Dolores, se encontró con una camioneta estacionada con las luces altas, lo que lo encandiló. Fue en ese momento cuando, de manera repentina, apareció el señor con la silla de ruedas cruzando la carretera. “No lo logré ver”; dijo.

Don Miguel Ángel Narváez Sandino fue trasladado al Hospital Regional Santiago de Jinotepe, presentando golpes, especialmente en las extremidades inferiores.

Mientras tanto, agentes de tránsito de la Policía Nacional se presentaron en el lugar del accidente para realizar las investigaciones pertinentes y deslindar responsabilidades.

Foto: Tragedia en Carazo /TN8
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Es importante que las familias tomen precauciones para evitar que las personas de la tercera edad se expongan a accidentes, especialmente cuando están incapacitados para andar.

En estos casos, es recomendable delegar las diligencias a otro miembro de la familia que pueda hacerlo.