¡Sandino vive, la lucha sigue!, coreando canciones revolucionarias, miles de nicaragüenses se congregaron en el barrio San Judas, en Managua, para participar en el Repliegue Táctico al Vapor, conmemorando el 45 aniversario de este evento heroico.
Han pasado 45 años de esta gesta, guerrilleros del Frente Sandinista, acompañados por miles de combatientes, decidieron retirarse de los barrios de la capital con el objetivo de detener la masacre cometida por la dictadura somocista contra el pueblo.
«Nosotros venimos desde muy temprano y aquí estamos con mucho entusiasmo, vamos al Repliegue, a este, al más grande y a todos los que podamos»; Alejandro Cruz, Rector Universidad Casimiro Sotelo.
En esta operación guerrillera, la población del valeroso barrio de San Judas se destacó como un fuerte apoyo del Frente Sandinista de Liberación Nacional; numerosos jóvenes se unieron a la causa con la firme convicción de emancipar al pueblo de la opresión del régimen.
Homenaje a los héroes y mártires del Frente Sandinista en Managua
«Estamos conmemorando un año más del Repliegue al vapor, esta gesta histórica que la hicimos todos los combatientes con nuestros mártires y héroes, así que hoy estamos en alegría, nuestra patria está en alegría por el momento revolucionario»; Argentina López, militante Sandinista
Esta operación táctica consistió en la retirada estratégica de la población del barrio San Judas, y otros barrios aledaños hacia la Hacienda El Vapor; desde donde reconcentrarían fuerzas para dar el golpe final a la dictadura somocista. No obstante, en la tarde del 16 de junio, la Guardia Nacional penetró a través de los cafetales y atacó a los jóvenes.
«Conmemoramos esos tiempos duros donde el pueblo de Nicaragua se replegó y además tuvimos héroes y mártires caídos en el tiempo que la genocida guardia somocista mató de manera criminal, estamos recordando este momento histórico que no podemos olvidar»; expresó Carlos Saenz, secretario general del MINSA.
Conmemorar es fuente de inspiración y fuerza moral para la militancia sandinista y como es una tradición, tras la caminata de un poco más de 10 kilómetros; se concluyó con un acto político, cultural, en la que los participantes cantaron música revolucionaria y se presentaron danzas folclóricas.
