El neurocirujano que operó del cerebro al zaguero brasileño de la Roma, Leandro Castán, se mostró muy cauteloso sobre la posibilidad de que vuelva a jugar, y dijo que dependerá «si todo anda bien y no hay complicaciones».
Castán fue intervenido el miércoles para extirpar una malformación vascular congénita del cerebro, llamada cavernoma, que medía tres centímetros y que fue «completamente removida» en una cirugía que duró tres horas y media.
El médico Giulio Maira precisó: «Es verdad que otros jugadores en el pasado volvieron a jugar después de una intervención como esta, pero hay que decir que cada cavernoma es distinto», señaló en una entrevista publicada el jueves por la Gazzetta dello Sport. «Es necesario esperar y ver si se producen consecuencias de algún tipo,
neurológicas o no», puntualizó.
Descartó que, en el caso que vuelva a jugar, que sea en el actual campeonato que finaliza en mayo próximo, e insistió que «cualquier cosa sobre esto es prematuro».
«Lo que importa es que Castán haya resuelto el grave problema, en un intervención que fue muy compleja porque el cavernoma se encontraba muy profundo en la cabeza y además estaba muy cerca del nervio facial», manifestó.
«Al final», agregó, «hicimos una resonancia magnética que dio resultados confortables, aunque es prematuro hacer un pronóstico, pero tras la operación, el futbolista habló y pidió de inmediato informaciones sobre su condición», expresó.
El defensa brasileño de 28 años no ha jugado desde el triunfo por 1-0 en campo del Empoli el 13 de septiembre, cuando fue cambiado al descansoen su única aparición esta temporada a causa de mareos agudos.
Internacional en dos ocasiones con Brasil, Castán firmó por la Roma en 2012 y fue uno de los mejores defensas de la Serie A durante sus dos primeras temporadas en Italia.
ROMA (AP)
