Si Adam Jones estaba desalentado luego que los Orioles perdieron los primeros dos encuentros de la Serie de Campeonato de la Liga Americana en casa, lo disimuló bastante bien.
«Vamos a reaccionar. Viajaremos a Kansas City. Hemos sido un equipo muy bueno como visitante. Así que iremos allá a divertirnos y a comer carne ahumada», dijo Jones en referencia al platillo típico de esa ciudad.
El primer vuelacerca de Jones en postemporada sirvió de poco el sábado, luego que el cerrador Zach Britton y el resto del bullpen de Baltimore cayeron en una mala racha en el momento más inoportuno. Como resultado, los Orioles perdieron juegos seguidos en casa por primera vez desde junio.
Baltimore fue capaz de reaccionar cuando estuvo en desventaja, pero nunca se puso arriba en la pizarra, y cayó 6-4 ante los asombrosos Reales, un equipo que se coló a los playoffs con el boleto de comodín.
Britton permitió el hit que rompió el empate en la novena entrada.
La serie se muda a Kansas City, donde el tercer juego se realizará el lunes. Ahora los Orioles deben intentar algo que ningún equipo ha conseguido: ganar una Serie de Campeonato a siete encuentros luego de perder los dos primeros en casa.
Estas series se ampliaron de un máximo de cinco a siete duelos en 1985. Baltimore es el duodécimo equipo que se ve abajo por 2-0 luego de abrir en casa, de acuerdo con la firma STATS. Ninguno de los otros 11 equipos logró obligar siquiera a un séptimo encuentro, y seis fueron barridos.
«La serie no ha terminado. Si ustedes creen que esto está liquidado, ¿entonces para qué tenemos que jugar el lunes?», preguntó Jones, cuyo vuelacerca de dos carreras empató temporalmente 3-3 el encuentro sabatino. «Yo confío en mi equipo y mi equipo confía en mí. Volveremos acá, a Baltimore.
Para hacer eso, los Orioles necesitarían ganar al menos dos de los próximos tres juegos, frente a un oponente que tiene una foja de 6-0 en estos playoffs.
Jones tiene razón cuando destaca la capacidad de su equipo para ganar en parque ajeno. Baltimore ostentó una foja de 46-35 como visitante, empatada como la segunda mejor de la Liga Americana en 2014.
Pero hubo un equipo que ganó 47 duelos fuera de casa: Kansas City.
«Jugar en tu parque y perder dos juegos es muy duro», sintetizó Bud Norris, quien admitió cuatro carreras en cuatro entradas y un tercio. Es el segundo día seguido en que el abridor de Baltimore no llega al quinto inning.
Los Orioles no habían perdido dos duelos consecutivos en Camden Yards desde el 28 y 29 de junio, ante Tampa Bay. Desde entonces, habían tenido un récord de 33-10 en Baltimore, hasta que cayeron 8-6 en el primer juego, cuando los relevistas Darren O’Day y Brian Matusz admitieron cuadrangulares en el décimo episodio.
Esta vez, luego de verse abajo por 3-1 y 4-3, los Orioles estaban empatados 4-4 en el comienzo de la novena entrada. El bateo oportuno de los Reales definió después el encuentro.
«Ellos hacen un gran trabajo para conectar la pelota», dijo O’Day, quien ha perdido los dos juegos. «Si hubieran bateado ciertas pelotas con más o menos fuerza, hubieran sido outs».