Con la mirada puesta en las sonadas contrataciones de figuras como James Rodríguez, Toni Kross y Raúl Jiménez, Real Madrid y Atlético de Madrid se juegan esta semana la Supercopa de España ida el martes en el Bernabéu y vuelta el viernes en el Calderón en el primer encuentro de los dos equipos de la capital tras cruzarse por última vez en el choque decisivo de la Liga de Campeones.
Aquella final del pasado 24 de mayo la ganó el Madrid 4-1 en la prórroga, forzada a un minuto y medio del tiempo reglamentario, cuando el Atlético no pudo aguantar su ventaja de 1-0. Los blancos juegan la Supercopa en calidad de campeones de la Copa del Rey, mientras que el Atlético la alcanza al haber ganado la liga, competición que los nueve años previos se habían repartido Madrid y Barcelona.
Para el Atlético se trata del primer partido oficial de la presente temporada antes del arranque del campeonato el próximo sábado, y también de una excelente oportunidad tanto de cobrarse revancha ante el Madrid como de medir su fortaleza tras sus múltiples bajas en el plantel.
El gran objetivo del año para la entidad «merengue» es celebrar el triplete que incluye liga, Champions y Copa del Rey, aunque el sueño sería la perfección: conseguir sumar los seis títulos en disputa.
Llevarse la Supercopa doméstica pondría en dos de dos al cuadro de Carlo Ancelotti, quien anunció en la previa que sería el internacional español Iker Casillas, quien ocuparía el arco en lugar de Navas, pese a que el «tico» lució buena mano en el último amistoso de los merengues, una derrota por 2-1 el sábado ante la Fiorentina.
El cruce con el reforzadísimo Real Madrid presenta una buena oportunidad para que Simeone calibre si su equipo, remodelado con las llegadas del ex goleador del Bayern Munich, el croata Mario Mandzukic, el francés Antoine Griezmann (ex Real Sociedad) y el mexicano Jiménez (América) está en disposición de repetir éxitos pasados, después de que ilustres como el ariete Diego Costa, el lateral Filipe Luis o el arquero Thibaut Courtois emigraran al Chelsea y el delantero David Villa recalara en la liga estadounidense.
Para el Madrid, el morbo recala en saber si Ancelotti dará entrada en el once inicial al argentino Angel Di María, pendiente de un posible traspaso pero rayando a gran nivel en la pretemporada.
El Madrid, que ha conquistado nueve ediciones, ganó el torneo por última vez en 2012, cuando se impuso al club azulgrana también por los goles de visitante.
Los rojiblancos solo la conquistaron en 1985, perdiendo cuatro finales.
BARCELONA, ESPAÑA (AP)