La lluvia podría ser el único obstáculo para que Mercedes conquiste su tercer título de constructores consecutivo este fin de semana en el Gran Premio de Malasia de la Fórmula Uno, mientras el nuevo líder del campeonato Nico Rosberg busca aumentar su ventaja sobre su compañero de equipo Lewis Hamilton.
La única carrera que Mercedes no ganó este año fue cuando Rosberg y Hamilton chocaron en Austria, y la escudería alemana está a punto de asegurar el título con cinco fechas de anticipación. Sólo necesita tres puntos más que su escolta Red Bull.
El pronóstico del tiempo es de tormentas para el fin de semana, en un circuito de Sepang que ha sido azotado por aguaceros en años anteriores.
Rosberg ganó las tres últimas carreras y remontó una desventaja de 19 puntos ante Hamilton, para superarlo por ocho unidades. La rivalidad entre los dos pilotos de Mercedes ha provocado tensión fuera de la pista.
«Estamos compitiendo muy duro en la pista, e incluso fuera de la pista», dijo Rosberg el jueves. «Es una batalla tremenda y todo cuenta, en muchos sentidos».
El alemán jamás ha ganado en Sepang, aunque esta temporada consiguió victorias en otros cinco circuitos en los que tampoco había alzado el puño.
En cambio, la campaña de Hamilton ha ido en picada desde que ganó tres carreras al hilo a mitad de año.
«He tenido altibajos, he tenido algunas rachas buenas y otras malas, así que esto no es muy distinto», dijo Hamilton al explicar el cambio de papeles. «Lo importante es cómo lo manejas».
En la carrera pasada en Singapur, Hamilton lidió lo mejor que pudo y cruzó la meta tercero, a pesar de encarar problemas mecánicos durante el fin de semana.
Sin embargo, el británico insinuó el jueves que hay cierto descontento. Cuando le preguntaron sobre los cambios a los ajustes de su bólido en las carreras recientes, dijo que «cuando se cambia algo que no se tiene que cambiar, puede haber todo tipo de resultados».
«Hay otras cosas tras bastidores en las que (el equipo) puede esforzarse más, pero eso es algo interno», agregó.
Por su parte, el piloto de McLaren Jenson Button manejará en su carrera 300, sumándose a Michael Schumacher y Rubens Barrichello como los únicos pilotos que alcanzan esa cifra.