Julio Urías es el zurdo nacido en México, con 20 años de edad. José De León es el derecho de Puerto Rico, cuatro años mayor. Los dos abrieron juegos en días consecutivos por los Dodgers de Los Angeles esta semana en el Yankee Stadium, la clase de sincronía que ambos novatos se plantearon como objetivo en esta temporada.
Gigantes amplían ventaja para wild card
Urías llegó primero a las mayores, a fines de mayo. De León debutó durante el último mes. Los aportes de ambos han sido vitales para los líderes de la división Oeste de la Liga Nacional, que realmente no habían programado contar con ellos durante esta campaña.
Se conocen desde 2014 y mantienen un fuerte vínculo de amistad. Durante la pausa por el Juego de Estrellas, Urías viajó a Puerto Rico y se quedó en la casa de De León.
«Mi mamá (Ady) lo llama hijo. Es mi hermanito», dijo De León a The Associated Press. «La tengo un cariño especial a Julio y poder estar los dos contribuyendo a los Dodgers es algo especial», destacó De León.
Vecinos de casillero en la pretemporada, en la que absorbieron las enseñanzas de Greg Maddux el miembro del Salón de la Fama aspiraban que 2016 sería el año en el que ascenderían a las Grandes Ligas.
«Al empezar la temporada nos propusimos la meta de subir», mencionó Urías a AP. «El que se quedaba abajo, iba esforzarse para subir. A mí me tocó la oportunidad primero y ahora él me alcanzó. Estoy contento de tener a un verdadero amigo aquí, al lado mí. Estar juntos en la rotación de los Dodgers es un sueño, y la idea es que estemos juntos los próximos años».
Los Dodgers no tenían la intención de apresurar el llamado a sus dos mejores prospectos, algo que su manager Dave Roberts reconoció esta semana.
«Yo me imaginaba que José iba a estar en Puerto Rico ahora mismo. Quizás Julio quizás sí iba a estar, pero solo en plan de observar», declaró Roberts. «Es obvio que se aceleraron sus ascensos. Sabíamos que teníamos profundidad en el roster y talento de calidad, pero no auguraba el impacto que han tenido».
Pero no tuvieron remedio de lanzarlos al ruedo debido a la plaga de lesiones que por segunda temporada seguida asoló al equipo, particularmente en su rotación. Han empleado a 15 abridores, uno menos que el año pasado, tras un rosario de bajas que han incluido a Clayton Kershaw, Hyun-Jin Ryu, Scott Kazmir, Brett Anderson y Brandon McCarthy.
Urías, De León, Ross Stripling y Brock Stewart han sido los novatos que ha tenido que tapar los huecos.
En total, los Dodgers han colocado a 28 jugadores distintos en la lista de incapacitados, la mayor cantidad de un equipo en las últimas tres décadas, según Stats.
Pese a las lesiones y haberse rezagado a ocho partidos del primer lugar a fines de junio, Los Angeles se encamina a su cuarto título seguido en la división. Amanecieron el sábado con una ventaja de cuatro juegos sobre los Gigantes de San Francisco.
¿Cómo estarían los Dodgers sin los aportes de novatos como Urías y De León?
«Probablemente estaríamos fuera», admitió Roberts. «Es algo que realmente nadie anticipó, pero son tantas las cosas que puedo decir sobre cómo han respondido ante cada momento. No se intimidan para nada»
Rumbo a los playoffs y en busca de su primer campeonato de la Serie Mundial desde 1988, los Dodgers son precavidos con el uso de sus dos novatos latinoamericanos. Kershaw, Rich Hill y Kenta Maeda liderarían la rotación de postemporada.
Luego que Urías (4-0, 2.02 de efectividad en sus últimas ocho salidas) acumulase un récord personal de 117 innings, el zurdo será empleado como relevista de ahora en adelante.
«Es la decisión del equipo y estoy preparado para todo lo que me necesiten», dijo Urías.
Victorioso en sus primeras dos actuaciones, De León abrirá el domingo en Arizona. El boricua empezó la campaña con una lesión en el hombro y confía ser tomado en cuenta para la postemporada.
«Siempre he sido creyente que uno controla lo que uno puede controlar», dijo De León. «Yo me sentía preparado. Tenía que esperar que ellos me dieran la oportunidad. Ha sido un año bien diferente, pero el que más me ha gustado porque estoy en Grandes Ligas. Estamos cerca de entrar a la postemporada y ahí, si se puede, buscar ganar la Serie Mundial».
