El Barcelona se presentó en Europa borrando las dudas que planteó su partido ante el Alavés y aplastó con majestuosidad por 7-0 a un Celtic que apenas mantuvo durante tres minutos el 0-0 en el marcador.
El Barça es feliz si la MSN sonríe y brilla. Y el Celtic pagó los platos rotos de lo sucedido el último sábado. Messi marcó un hat-trick, Suárez dos goles y otro más Neymar, quien asistió en cuatro de las dianas del equipo azulgrana.
El campeón de Liga presentó sus credenciales en Europa atropellando a un Celtic desbordado de cabo a rabo, incapaz de frenar la tormenta futbolística que se le vino encima y que saludó agradecido el final del partido.
A lomos de un Messi eléctrico en la primera mitad, el equipo de Luis Enrique, que presentó ocho variaciones en el once inicial respecto al del sábado, se desembarazó con autoridad de un rival animoso pero tremendamente inferior, que desaprovechó su momento clave y se rindió sin apenas presentar batalla.
Su momento lo tuvo, casi de casualidad, en el minuto 24, cuando Dembélé mostró su velocidad para llegar al balón una milésima antes que Ter Stegen, quien le derribó en un claro penalti… Que el portero alemán, milagrosamente reaparecido, atajó al propio delantero francés.
Tres minutos después una jugada de fútbol sala entre Neymar y Messi acabó con el 2-0 anotado por Leo y el campeón escocés se rindió. En media hora el fantasma del Alavés había desaparecido del ambiente y el Camp Nou disfrutaba entregado a un Barça reencontrado consigo mismo.
Antes de llegarse a los cinco minutos de la continuación Neymar marcó el 3-0 y en un abrir y cerrar de ojos Iniesta y Messi pusieron el 5-0 en el marcador. El golazo de Iniesta, el primero que anota después de 33 partidos, fue digno de admiración tanto por el fenomenal centro de Neymar como por su excepcional volea.
Messi ya llevaba su hat-trick y Luis Suárez, la tercera pata de la MSN, se sumó al festival con una diana bestial, tras otra asistencia maravillosa de Ney, que este miércoles podrá presentar con toda felicidad su carrera musical después del magnífico concierto futbolístico que brindó ante el Celtic.
Luis Enrique aparcó del plano a la segunda unidad o, más bien, puso en el escenario a los cracks, a los de siempre. Y Umtiti se sintió tan cómodo al lado de
Piqué como André Gomes brilló entre la catarata futbolística del Barça. Claro que con la MSN, con la delantera mágica, todo es más fácil y se adivina sencillo.
Messi marcó tres goles y Neymar asistió en cuatro, anotando otro y dejando dos más para Luis Suárez. La MSN estuvo presente de principio a final y el Barça jugó como quiso frente a un Celtic cuyo desempeño en la Liga española se sospecha sería, con suerte, discreto.
El Barça presentó su candidatura a la Champions con una goleada magistral. Aunque lo hizo, todo hay que decirlo, aplastando a un Celtic de chocolate.