Jamal Crawford jugador de Los Angeles Clippers que llegó a la NBA en el octavo puesto del draft por Cleveland Cavaliers, vivió un momento crítico en el 2001, cuando por culpa de unos malos negocios y movimientos con jugadores profesionales, estuvo a punto de ser asesinado por ellos al tener una deuda cercana a los 100.000 dólares.
Según contaron unas personas cercanas a él, lo que comenzó como una noche de juegos de dados, terminó con una deuda superior a lo que cualquier persona podía imaginar, principalmente porque en ese momento no tenía el dinero como para sacar y pagar en un solo contado, ya que estaba recién llegado a los Bulls de Chicago, conjunto con el que debutó en el año 2000.
La historia de Jamal Crawford que pudo llevarlo a la muerte
Al parecer, el jugador que llegó con 2.000 dólares para apostar, se ganó inicialmente 10.000 dólares en esa noche, luego de ganarles a otros jugadores, aunque antes de irse decidió seguir con las apuestas y tras ir perdiendo un poco más de 15.000 dólares, no siguió el consejo de sus acompañantes de retirarse, ya que se estaba jugando con fichas y esto no era dinero real, razón por la cual él siguió jugando hasta llegar a los 100.000 dólares abajo, momento en el cual se marchó sin responderle a los jugadores, quienes decidieron seguirle y cobrarle.
Fue ahí cuando Aaron Goodwin, su representante, tuvo que mediar con los histéricos cobradores, quienes querían que les pagaran ya, donde incluso el intermediario le llegó a decir que si no pagaban, esas personas podían llegar a matar a Jamal.
A partir de ese momento, la situación se puso mucho más complicada, ya que Goodwin les dijo que respondería por ese dinero, estableció un plan de pagos y resolvió el problema sin ningún inconveniente, dejando que esta situación se convirtiera en una simple anécdota, aunque pudo ser mucho más complicado si no se hubiera respondido. Desde ese momento y hasta hoy, el propio Crawford ha dicho que nunca más volvió a jugar fuera o dentro de un casino.