Finalmente pasó. Tras tres durísimos encuentros que se llevaron el galardón de pelea del año y un candidato para el 2016, tras ser nombrado como el peleador activo que más golpes recibió en la UFC, Robbie Lawler perdió su cinturón de peso welter por nocaut y Tyron Woodley demostró que es El Elegido en tan solo dos minutos del primer asalto.
Tras un período de casi total inactividad, Woodley fintó, pisó fuerte y lanzó un rápido volado de derecha que conectó con furia y dejó a Ruthless aturdido en la lona.Siguieron los golpes necesarios para cerrar la noche de UFC 201 y coronar a un nuevo campeón.
La próxima pelea por el cinturón de peso paja de la UFC será una batalla entre polacas, ya que Karolina Kowalkiewicz se sobrepuso a Rose Namajunas por decisión dividida para ganarse un encuentro con Joanna J?drzejczyk. A la distancia la pelea era de Namajunas, que con mejor movimiento y precisión a la hora de golpes rectos se llevó cómodamente el primer asalto, pero cuerpo a cuerpo era otra cuestión. Durante largos trechos del segundo y tercer round, Kowalkiewicz fue capaz de capturar a Thug Rose en un clinch de Muay Thai y aplicar una devastadora ofensiva de rodillas y codos que le ganaron la victoria.
Matt Brown no pasa por su mejor momento. El inmortal buscaba reponerse de una derrota por sumisión frente a Demian Maia, pero en cambio terminó noqueado frente a Jake Ellenberger al minuto y 46 segundos del primer asalto. Para crédito de Brown y su apodo, pudo recuperarse de un volado de derecha a la quijada que literalmente lo dejó flotando en el aire por un brevísimo instante y defenderse lo suficiente para volver a ponerse de pie. Desafortunadamente para él, poco después llegó una perfecta patada al cuerpo que terminó con su noche.
Erik Goyito Perez se repuso de un primer asalto complicado, donde Francisco Rivera mantuvo la ventaja en el ritmo del striking, para sobreponerse con autoridad en el resto de la pelea y llevarse la decisión unánime.Usando movimiento y ventaja de alcance, Perez mantuvo la distancia y obligó a su rival a cansarse lanzando fuertes ataques a la nada mientras recibía contragolpes. Para el tercer asalto Rivera estaba sangrando y exhausto, pero Goyito se paró en el centro e intercambió golpes, sacando ventaja también ahí, para mostrar respeto a su oponente y el coraje de los mexicanos.
Fredy El Profe Serrano demostró que un buen fondo de lucha siempre será un arma poderosa, y que incluso si uno empieza tarde en el deporte puede sorprender mediante la creatividad. Serrano logró derribos con comodidad y pudo imponer respeto mediante una ofensiva poco común de pié. Pero su oponente Ryan Benoit demostró que la juventud y un juego de habilidades más pulido aunque menos llamativo son ventajas innegables. Desafortunadamente para El Profe, Benoit controló el ritmo de pié y bloqueó la gran mayoría de la ofensiva de Serrano cuando fue derribado, ganándole la decisión unánime.