La NFL y el sindicato de jugadores anunciaron el lunes una nueva política sobre conmociones cerebrales que se presentan durante los partidos, incluidas sanciones para los clubes que infrinjan el protocolo.
Bajo la nueva política, anunciada de manera conjunta, la liga y el sindicato «seguirán un proceso estricto y justo para investigar incidentes y determinar las medidas disciplinarias apropiadas, incluyendo multas a los clubes y la posible pérdida de selecciones en el draft».
La NFL y el gremio de jugadores designarán a un representante para supervisar la implementación del protocolo e investigar posibles infracciones. La investigación no llegará a conclusiones médicas, sino que sólo determinará si se siguió el protocolo.
Un juez de arbitraje se encargará de los casos en que la liga y el sindicato estén en desacuerdo, y presentará su reporte al comisionado.
Las sanciones por infringir el protocolo de conmociones sufridas durante los encuentros quedarán a criterio del comisionado Roger Goodell.
Tras una primera infracción, los empleados o equipo médico de un club involucrado deberán asistir a cursos que les permitan atender mejor ciertos casos. Además, el club podría ser multado por una suma máxima de 150.000 dólares.
Las infracciones posteriores derivarán en multas de al menos 100.000 dólares.
Habrá sanciones adicionales si la infracción es agravada. El comisionado podría imponer multas más severas e incluso podría quitar a los equipos selecciones en el draft si se determina que el equipo médico ignoró el protocolo intencionalmente para que un jugador continúe en un partido.