El dominicano José Reyes está agendado para reincorporarse a los Mets de Nueva York en el juego nocturno del martes contra los Marlins de Miami, su regreso a Grandes Ligas después de una suspensión por violencia intrafamiliar.
Tras la victoria del lunes por 8-6 sobre Miami, con remontada incluida, los Mets informaron que Reyes se dirigía a Nueva York después de cumplir una asignación en el equipo Binghamton de clase Doble A. El campocorto de 33 años, que ha participado en cuatro Juegos de Estrellas y militó en los Mets de 2003 a 2011, bateó para un promedio .176 (seis hit en 34 veces al bate) durante 11 juegos de ligas menores que comenzaron con dos en el equipo Brooklyn de clase A.
Reyes pasó a cubrir la tercera base en las menores y probablemente jugará en esa posición con Nueva York. El venezolano Wilmer Flores ha estado jugando en la tercera colchoneta ante la ausencia del capitán David Wright, quien probablemente se perderá el resto de la temporada después de una cirugía de cuello.
Terry Collins, manager de los Mets, dijo antes del juego del lunes que si Reyes ocupa el primer puesto en el orden al bate, el jardinero derecho Curtis Granderson podrá bajar al segundo.
«Pienso que batear segundo sería un buen lugar», señaló Collins. «Siendo José un bateador ambidextro, Grandy tiene la habilidad para hacerlo avanzar, y si José está embasado, tendríamos mucho huecos abiertos. Si José está corriendo desde la segunda base, al ser Grandy un chocador de bola tiene la opción de moverlo. Así que él trae algo a la mesa en esa posición».
Reyes dejó a los Mets después de ganar el título de bateo de 2011 de la Liga Nacional y firmar un contrato de seis años por 106 millones de dólares con Miami. En noviembre de 2012 fue cedido en canje a Toronto y en julio del año pasado se le envió a Colorado, que lo dio de baja después de cumplir este año una suspensión de 59 días impuesta por Grandes Ligas debido a violencia doméstica.
Las Grandes Ligas impusieron la sanción después de que Reyes se involucró en un altercado con su esposa en octubre. A raíz de esos hechos, se presentó una acusación penal, retirada después.
Reyes firmó un contrato de las menores con los Mets, quienes querían que se pusiera en forma.
Aunque consideró terribles los actos de Reyes, Wright dijo que su viejo compañero merece una segunda oportunidad.
Nueva York pagará al dominicano sólo una parte prorrateada del salario mínimo de las Grandes Ligas, que es de 507.500 dólares. Colorado es responsable por el resto de su salario de 22 millones de dólares en este año, 22 millones la próxima temporada y una rescisión de cuatro millones para 2018.