Heridas de corrupción que todavía no cicatrizan, la ausencia de una de sus principales figuras y con otras dos estrellas entre algodones. Sin duda, no se trata de la fiesta de cumpleaños que la Conmebol tenía en mente para festejar los 100 años de su torneo insignia.
La Copa América Centenario se pone en marcha el viernes con las huellas todavía frescas de los escándalos que provocaron los arrestos de seis expresidentes de los dos organismos continentales que organizan el campeonato, la Conmebol y la CONCACAF, en algunos casos imputados por solicitar millonarios sobornos a cambio de los derechos comerciales de este mismo torneo.
Estados Unidos y Colombia darán el puntapié inicial en Santa Clara, California, una de las 10 sedes estadounidenses del torneo ideado para celebrar el centenario del torneo de selecciones más antiguo del mundo, que por primera vez se realiza fuera de Sudamérica.
«Esta copa es un torneo especial. Yo no me animaría ni siquiera a llamarla Copa América», contempló recientemente el técnico de la selección de Uruguay, Oscar Tabárez. «Además, no tiene nada que ver a la hora de competir, pero las dos confederaciones son las más castigadas por los actos de corrupción que fueron descubiertos. Todo eso forma parte del pensamiento».
El campeonato no contará con Neymar, el astro de la selección brasileña que fue reservado por el técnico Dunga para disputar los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en agosto. Sus dos socios en el tridente de ataque del Barcelona, Lionel Messi y Luis Suárez, están tocados después de largas campañas: el primero se lastimó las costillas y la zona lumbar en un reciente amistoso con la selección argentina, mientras que Suárez se lesionó la corva derecha en la final de la Copa del Rey.
Hasta ahora no hay un panorama claro sobre la disponibilidad de Messi para jugar el debut de Argentina el lunes en Santa Clara contra Chile, el mismo oponente que la derrotó en la final de la Copa América del año pasado. Lo que sí es seguro es que el delantero y máxima figura del fútbol mundial tiene que atender primero otros asuntos más serios, ya que el martes comienza su juicio en España por evasión fiscal.
Con o sin Messi, la Albiceleste presenta un plantel formidable con galácticos como Sergio Agüero, Angel Di María y Gonzalo Higuaín. Y la meta del plantel dirigido por Gerardo Martino es clara: poner fin a un ayuno de 23 años sin un título importante a nivel de selecciones mayores.
«Nos daría tranquilidad a todos, absolutamente a todos», señaló el técnico sobre la posibilidad de ganar la Centenario, al mismo tiempo que lanzó una advertencia. «Como nos ponemos la mochila de candidatos y lo reconocemos, también digo que hay muchos que tienen esas mismas posibilidades por los futbolistas que la componen», apuntó
Suárez realizará la primera parte de su recuperación en Barcelona, y el plan de la selección de Uruguay es que se incorpore al plantel en Estados Unidos. El «Pistolero», máximo artillero de la pasada liga española (40 goles) y autor de 53 dianas en 48 partidos en todas las competencias, probablemente se pierda los tres partidos de la fase de grupos ante México, Venezuela y Jamaica.
Para algunos, el momento de la Centenario inmediatamente después de las largas temporadas europeas, cuando las selecciones disputan las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de 2018, y a dos meses de los Juegos Olímpicos representa un dilema sobre cómo priorizar torneos.
Tal es el caso de selecciones como Colombia, Argentina, Brasil y México, que disputarán los Juegos de Río. La «Verdeamarela», que además de Neymar no contará con Douglas Costa por lesión, ya decidió que su prioridad es buscar el oro olímpico, el único título que falta en sus vitrinas.
Colombia intenta encontrar un equilibrio.
«Competimos con aspiraciones. Pero si no lo hacemos pensando en los Olímpicos, y luego en la eliminatoria sería algo que nos reprocharíamos», analizó el técnico de Colombia, José Pékerman.
Colombia espera que la inactividad con el Real Madrid de su gran referente, James Rodríguez, no afecte su rendimiento. El enlace fue relegado a la banca por el timonel Zinedine Zidane, y no jugó un solo minuto el sábado en la final de la Liga de Campeones que los merengues ganaron al Atlético de Madrid en una definición por penales.
James usualmente eleva su rendimiento con la selección, como hizo en 2014 al llevarla hasta los cuartos de final de la Copa del Mundo, y esta vez encabeza a un plantel en el que Pékerman emprendió una renovación. Afuera quedaron antiguos referentes como Radamel Falcao, Teófilo Gutiérrez y Abel Aguilar, para dar paso a nuevas figuras como Roger Martínez, Cristian Bonilla y Felipe Aguilar.
México, actual campeón olímpico, llevará a sus principales figuras a la Centenario, incluyendo a Javier «Chicharito» Hernández, Andrés Guardado y Raúl Jiménez.
«Creemos que el fútbol mexicano está en buen momento y en Estados Unidos será bien apoyada por la afición», señaló el entrenador de México, Juan Carlos Osorio. «Lo estamos tomando como una gran oportunidad para competir y probar el alto nivel que tiene el fútbol mexicano».
México es uno de los seis equipos de la CONCACAF que se suman a los 10 de Sudamérica para disputar el campeonato. Los otros son el anfitrión Estados Unidos, Panamá, Costa Rica, Haití y Jamaica.
Costa Rica anunció el lunes que no tendrá a su máxima figura, el portero Keylor Navas del Real Madrid, por una lesión del tendón de Aquiles.
Los dos mejores equipos de cada uno de los cuatro grupos avanzan a los cuartos de final, y la final se disputará el 26 de junio en el estadio MetLife en East Rutherford, Nueva Jersey.