Para Juventus, ganadora de los últimos cinco scudettos seguidos, es un título más. Para el Milan, en cambio, es el pasaporte a las competencias europeas y la posibilidad de alzar su primer trofeo desde el 2011.
La final de la Copa de Italia a jugarse el sábado enfrenta a rivales con situaciones muy contrastantes.
Juventus acaba de ganar por quinto año seguido la liga y busca ser el primer equipo italiano que consigue el doblete liga y copa dos años seguidos.
«Empezamos el año ganando la Supercopa en Shanghai (2-0 al Lazio) y podríamos terminarlo en grande ganando la Copa de Italia», declaró el delantero juventino Paulo Dybala, autor de 23 tantos en su primera temporada con la Juve. «Sería el broche de oro para la temporada».
Milan, por su parte, terminó séptimo en la Serie A y quedó afuera de las competencias europeas por tercer año seguido. No gana un título desde la Supercopa italiana del 2011.
Un triunfo, por otro lado, le vendría muy bien el presidente «rossonero» Silvio Berlusconi, que está negociando la venta del club a inversionistas italianos.
El partido ofrece al técnico interino Cristian Brocchi y al delantero Mario Balotelli, cedido a préstamo por Liverpool, una última oportunidad de causar una buena impresión.
Brocchi era técnico de las inferiores y reemplazó en forma interina a Sinisa Mihajlovic el mes pasado. Cosechó apenas dos victorias en seis partidos y cerró la campaña de la Serie A con una derrota 3-1 como local ante Roma el fin de semana pasado.
Balotelli, por su parte, anotó apenas un gol en 20 partidos de liga y su futuro es un misterio, pues Milan no tiene interés en retenerlo y Liverpool no lo quiere de vuelta.
Es previsible que Balotelli salga en el banco y que el colombiano Carlos Bacca, autor de 20 tantos esta temporada, encabece el ataque.
El técnico juventino Massimiliano Allegri usaría a todos los titulares disponibles con una sola excepción. El capitán Gianluigi Buffon dejaría el arco al brasileño Neto, que jugó todos los partidos de copa.
El equipo, no obstante, echará de menos al zaguero Leonardo Bonucci, suspendido, y a los volantes Claudio Marchisio y Sami Khedira, ambos lesionados
Dybala y Mario Mandzukic estarían en el ataque.
Si Juventus gana, Sassuolo, que terminó sexto, jugará la próxima Liga Europa junto con Inter y Fiorentina, que ocuparon el cuarto y quinto lugar respectivamente. Si gana Milan, se clasificará a la Liga Europa y Sassuolo quedará afuera.