Lionel Messi logró un triplete y el Barcelona goleó el jueves por 5-1 al Rayo Vallecano de visitante, firmando un nuevo récord de 35 partidos invictos consecutivos para un equipo de la liga española, y recaudando tres puntos más que también dejan considerablemente despejado su camino hacia la conquista del campeonato.
La décima victoria seguida del cuadro azulgrana en el torneo empezó con un gol de Ivan Rakitic a los 22 minutos y cerró con otro de Arda Turan a los 86. Pero entremedio, Messi (23, 53 y 72) exhibió su habitual magia con tres tantos que dejan su cuenta liguera en 19 y al Barsa en inmejorable posición cuando restan 11 fechas para la conclusión.
Los azulgranas cerraron la 27ma fecha con 69 puntos y visitan el domingo al Eibar por la 28va. Les escolta con 61 unidades el Atlético de Madrid, que ganó el martes por 3-0 a la Real Sociedad y visitará al Valencia en la jornada dominical.
El Real Madrid también venció el miércoles por 3-1 al colista Levante, marcha tercero con 57 puntos y oficiará de local el sábado contra el Celta de Vigo.
La anterior marca invicta para un club español la estableció precisamente el Madrid, con 34 cotejos en la temporada 1988-89. Ahora, el Barsa aspira a traspasar fronteras y rebasar los 43 de la Juventus en 2011-12.
Aunque la prioridad para el plantel de Luis Enrique son los títulos. Una noción inconcebible para el apurado Rayo, que acabó con nueve futbolistas, apenas pudo recortar por vía de Manucho (57) y actualmente marca el límite con la zona del descenso.
El Barsa contempló un buen rato como el equipo madrileño imitaba con cierto éxito su estilo basado en posesiones largas, aunque las únicas ocasiones locales se produjeron en conducciones de Adrián Embarba que acabaron en disparos lejanos bien blocados por el chileno Claudio Bravo.
El arquero barcelonista jugó también un rol relevante en la construcción ofensiva, colaborando en la salida limpia del balón para superar la presión avanzada local.
Pero la diferencia la marcaron de nuevo los tres de arriba para el Barsa y, tras un primer aviso de Neymar, Messi probó al poste corto de Juan Carlos Martín, quien repelió sin caer en el engaño.
Sin embargo, el marcador se inauguró de manera inesperada, con un centro aparentemente inocuo que Martín no acertó a blocar, dejando el balón franco para Rakitic, raudo en el control y ejecución de la volea a la red.
Inclinada la cancha, Messi y Neymar combinaron al contragolpe y el argentino no desaprovechó la devolución del brasileño, colando la pelota por bajo, justo en el rincón previamente negado por el arquero.
El Rayo no se desanimó, pero Quini tampoco acertó a recortar en cabezazo franco, y la cosa se puso aún más peluda con la expulsión por tarjeta roja directa de Diego Llorente, demasiado impetuoso en la pelea de un balón con Rakitic.
La segunda mitad arrancó con sendos remates cruzados de Neymar y Suárez, fuera poco, y el tercero subido por Messi tras remate al poste del uruguayo.
Tiraron de tesón los locales y la entrada en escena de Manucho les permitió recortar con un gol de nueve puro del suplente, tras dejada aérea de Bebé.
Pero el tridente azulgrana no bajó el pistón, bien secundado por Sergio Busquets y Andrés Iniesta en el mediocampo, y siguió haciendo estragos en la defensa rayista, que frenó a Rakitic con falta al borde del área, vio como Messi impactaba el travesaño en la ejecución y Busquets caía en busca del rechace en pugna con Manuel Iturra. El árbitro decretó penal y expulsión del chileno, pero Suárez falló de nuevo el lanzamiento desde los 11 metros, prácticamente el único lunar de los azulgranas en la temporada.
Lo que no resolvió el charrúa sí lo hizo Messi en su siguiente escapada, en que aguantó los embistes de la defensa y desestimó la asistencia a Neymar, templando con la zurda para completar su «hat-trick» antes de que Arda cerrará de cabeza otra autoritaria victoria del Barsa, aparentemente imparable en la carrera por la liga.
En otros partidos, el Betis ganó 3-0 en cancha del Espanyol y se distanció en tres puntos del cuadro «periquito» en la lucha por la permanencia. Rubén Castro (10) abrió la cuenta por los andaluces, que ampliaron gracias al argentino Germán Pezzella (20) y el peruano Juan Vargas (71), quien firmó un golazo de tiro libre directo.
Con un tanto de Youssef El-Aarabi (72) de penal, más otro de Isaac Success en los descuentos, el Granada se impuso por 2-0 de local al Sporting de Gijón y le traspasó la condición de penúltimo clasificado. Los visitantes jugaron el tramo final con hombre menos por expulsión de Sergio Alvarez (83).