La CONCACAF no definió un voto unitario a ninguno de los cinco candidatos a ganar las elecciones de la FIFA que se celebran el viernes, pero el organismo latinoamericano sí aprobó el jueves un paquete de nuevas reformas estatutarias para combatir los casos de corrupción que han lacrado su más reciente pasado.
Los 41 delegados de la Confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe reunidos en su congreso extraordinario votaron de forma unánime a favor de las nuevas propuestas, que incluyen limitaciones de mandato, mayor transparencia financiera, y la inclusión de miembros independientes.
«Hemos implementado algunas reforma administrativas para proteger a la organización de cualquier posible abuso gubernamental, como límites de servicio, independencia en de ciertos organismos funcionales como la auditoria, finanzas y competencias, con un número de personas independientes que formaran el comité ejecutivo», avanzó a la AP Jurgen Mainka, subsecretario general de la organización.
El dirigente mexicano reconoció que de la palabra al hecho, hay un buen trecho, pero se mostró entusiasmado con la nueva etapa que encara la CONCACAF.
«Después de votar las reformas, toca implementarlas. Y para eso hay que cambiar la cultura. Pero es fútbol: el balón rueda para delante y hay que ir paso a paso», comentó Mainka.
«Juntos debemos hacer todo lo necesario para construir una FIFA más fuerte», pontificó el presidente interino del máximo organismo mundial, Issa Hayatou, en el discurso de apertura del congreso de la CONCACAF. «Hemos escuchado las críticas y tomado las medidas necesarias. Es esencial que nos unamos todos y apoyemos en su mandato al nuevo presidente, que tendrá la difícil misión de reestablecer la confianza de la institución».
El presidente de la federación estadounidense, Sunil Gulati, calificó el momento de la CONCACAF como «positivo», después de que sus tres últimos presidentes fueran arrestados o acusados en casos de corrupción.
«Hemos superado una crisis y teníamos que tener unas elecciones limpias. Con estos estatutos tendremos un procedimiento para tener unas elecciones libres y un nuevo líder», especificó Gulati, en referencia a la presidencia vacante de la CONCACAF.
Mainka no quiso especificar quien y como se llevaría a cabo el proceso de selección de los nuevos integrantes independientes, aunque aclaró que no necesariamente serían personas ajenas al fútbol.
«La independencia tiene unos ciertos parámetros. Quiere decir que no estés involucrado de una manera directa en alguna organización de fútbol donde tengas algún tipo de interés financiero, o mediante algún patrocinador. Pero ello no significa que no sepas de fútbol. Puedes haber sido un ejecutivo de fútbol que en los últimos años no haya estado involucrado en el tema financiero. Solo es que traes un punto de vista diferente y, sobretodo, independiente», expuso.
Entretanto, las elecciones de la FIFA se mantienen inciertas, con el suizo Gianni Infatino y el Jeque Salman destacando como favoritos, muy por delante del resto de candidatos: el Príncipe Ali, de Jordania, el francés Jerome Champagne y el sudafricano Tokyo Sexwale.
Todos ellos acudieron al congreso, que en principio no votará de forma unitaria, en busca de apoyo a sus respectivas candidaturas.
Salman aprovechó la ocasión para criticar de nuevo las promesas de una mayor financiación por parte de Infantino. «Solo se puede prometer lo que se puede cumplir», subrayó, al tiempo que aplaudió las reformas adoptadas por el organismo y se posicionó a favor de la ampliación de cupos mundialistas.
«Estas reformas son una muestra de la nueva CONCACAF que queremos todos, con mecanismos cruzados que permitan garantizar su transparencia. Los arreglos deben ser de abajo para arriba», añadió el presidente de la federación de México, Decio De María, quien dijo tener «claro» su voto particular, aunque no lo reveló, y aventuró una votación reñida, con posible segunda vuelta.
«No hay un bloque. Cada cual a su libre albedrío», subrayó Mainka, deseoso de superar los eventos del congreso del pasado mayo, cuando se detuvieron a siete dirigentes latinoamericanos, incluidos dos vicepresidentes de la FIFA.
«El fútbol no son los individuos, son las instituciones. El balompié es del mundo entero y va prevalecer, independientemente de quien esté en los diferentes despachos. El mundo del fútbol va a dar un gran vuelco en las próximas 48 horas, y estamos echando nuestro granito de arena para que ese futuro sea un poco mejor», concluyó.