Un año después de jugar la final de la Liga de Campeones con Juventus, Arturo Vidal procurará dejar afuera de ese torneo a la «Vecchia Signora».
«Es un partido especial para mí porque tengo muchos lazos con la Juve y le estoy muy agradecido», declaró el chileno, que jugó las últimas cuatro temporadas con el club turinés y ayudó a darle cuatro scudettos seguidos.
Vidal fue transferido el año pasado al Bayern de Múnich, rival de la Juve en los octavos de final de la Championes League.
«Pasé cuatro años increíbles allí. Me sentí como en casa. Los aficionados y el club siempre me apoyaron», expresó Vidal. «Hubiera preferido enfrentar a Juventus en las semifinales o en la final. No me gustó el sorteo. Pero así es el fútbol».
El estilo combativo y la entrega de Vidal cautivaron a los hinchas de la Juve.
«Admito que extraño a la Juve. Pero ahora defiendo esta camiseta y daré lo mejor de mí para que mi equipo gane los dos partidos y avance a los cuartos de final», dijo el chileno, quien jugó la final de la Champions del año pasado, que los italianos perdieron ante Barcelona.
Bayern ganó las tres últimas series que jugó con Juventus en la Champions.
Otro que enfrentará a su viejo club es Mario Mandzukic, quien salió campeón dos veces con Bayern antes de ser transferido primero a Atlético de Madrid y luego a la Juve.
Pero el croata viene de una lesión que lo tuvo un mes inactivo y resta por verse si juega.
Bayern tiene lesionados a tres pilares de su andamiaje defensivo –Holger Badstuber, Jerome Boateng y Javi Martínez–. Sin embargo, compensa cualquier flaqueza en su retaguardia con el poderío de un ataque que cuenta con Robert Lewandowski y Thomas Muller en gran forma. Llevan anotados 39 goles entre ambos (Lewandowski 22 y Muller 17) en 22 fechas de la liga alemana.
