Los jugadores implicados en un partido de tenis de dobles mixtos dijeron el lunes que habían sido entrevistados por la Unidad de Integridad del Tenis, después de que un periódico publicara que el encuentro había provocado patrones de apuestas sospechosos.
Según The New York Times, Pinnacle Sports dijo haber registrado un aumento poco habitual en las apuestas a un triunfo de Lukasz Kubot y Andrea Hlavackova sobre los españoles David Marrero y Lara Arruabarrena, lo que llevó a suspender el partido del domingo en el Abierto de Australia.
Todos los jugadores identificados por el periódico han rechazado cualquier posibilidad de amaño en el encuentro, que ganaron Kubot y Hlavackova 6-0 y 6-3 el lunes.
Kubot dijo que la agencia les había hecho preguntas sobre el encuentro, sin dar más detalles. Sí añadió que no había notado nada poco habitual, y señaló que «dimos el 100% en ese partido», y que creía que sus rivales «lo intentaron al 100%». Ningún jugador debería haber sido identificado sin pruebas de malas prácticas, afirmó.
Marrero y Arruabarrena rechazaron las acusaciones en una entrevista con el periódico y Marrero atribuyó su mal resultado a una lesión en la rodilla. Los tenistas no estaban disponibles el lunes para hacer declaraciones.
El tenis se ha visto bajo un intenso escrutinio desde la publicación el lunes pasado de artículos de investigación de la BBC y BuzzFeed News sobre que las autoridades de este deporte habrían ignorado indicios generalizados sobre arreglo de partidos que implicaría a 16 jugadores en el top 50 durante la última década. Los medios no identificaron a ningún jugador, pero señalaron que la mitad de ellos competirían en el Abierto de Australia.
Las autoridades del tenis rechazaron de inmediato la acusación de que habían eliminado pruebas sobre amaño de partidos o no investigado en profundidad los casos sospechosos.
La Federación Internacional de Tenis declinó hacer comentarios, y la agencia de ética no hace declaraciones sobre casos individuales.
Las noticias se producían mientras un ex tenista australiano que estaba entre los 200 primeros del mundo, Nick Lindahl, se declaraba culpable ante un tribunal de Sydney de un cargo de arreglo de partidos después de que la fiscalía le acusara de informar a dos personas de que iba a perder de forma deliberada un partido en un torneo de bajo nivel en 2013 para que pudieran apostar en su contra.