Una emergencia médica acaparó la atención el sábado en el Abierto de Australia, cuando el entrenador de Ana Ivanovic y suegro de Andy Murray fue llevado a un hospital mientras ambos tenistas jugaban sus partidos por la tercera ronda.
Murray derrotó 6-2, 3-6, 6-2, 6-3 a Joao Sousa y otorgó unos cuantos autógrafos, pero ausentó de la tradicional entrevista en la cancha y enfiló hacia la salida de la cancha Margaret Court el sábado por la noche para cerciorarse sobre la condición de Sears, el padre de su esposa embarazada.
Ivanovic aventajaba 6-4, 1-0 a Madison Keys cuando su partido fue detenido. Se pudo ver cómo Ivanovic decía «ese es mi entrenador» antes de salir de la cancha. Fue la segunda vez en tres días que un partido de la serbia es interrumpido porque un espectador necesitó asistencia médica. Su duelo por la segunda ronda fue retrasado por media hora cuando una mujer cayó por las escaleras de la arena Rod Laver.
Esta vez, la finalista de 2008 no pudo ganar. A pesar de tener quiebres a favor en el segundo y tercer set, Ivanovic perdió seis de los siete últimos games y cayó 4-6, 6-4, 6-4 ante Keys.
