La policía guatemalteca arrestó el martes a Brayan Jiménez, el ex presidente de la Federación Guatemalteca de Fútbol acusado en Estados Unidos como parte del abarcador caso por corrupción en el fútbol.
Jiménez, quien estuvo prófugo durante más de un mes, fue aprehendido en la capital guatemalteca. Contra el ex dirigente existe una solicitud de arresto con fines de extradición a Estados Unidos, donde está imputado de lavado de dinero, sobornos y otros delitos relacionadosarresto, con la venta de derechos comerciales de torneos de fútbol.
Jorge Aguilar, vocero de la Policía Nacional Civil, confirmó la captura y dijo que estuvo a cargo de un grupo élite antinarcótico.
«Ha sido capturado en un allanamiento en la zona 14 (de la capital guatemalteca)», dijo Aguilar. «Se mantuvo vigilancia y seguimiento previo a su detención».
Jiménez quién vestía una camiseta blanca y pantalón azul, se había dejado crecer la barba y aparecía con su cabello blanco canoso, diferente a como lucía previamente a la solicitud de arresto.
Junto a Jiménez también se acusa a Héctor Trujillo, de 62 años, ex secretario general de la federación y ex magistrado suplente de la Corte de Constitucionalidad de Guatemala, quien fue detenido el 11 de diciembre, dentro de un crucero que realizaba con su familia cuando hizo una parada en la Florida.
Trujillo fue enviado a Nueva York donde un juez le fijó una fianza de 4 millones de dólares, la cual canceló con dinero en efectivo y propiedades para permanecer bajo arresto domiciliario.
El caso se refiere a la concesión de la venta de derechos de partidos de fútbol a una firma de Miami llamada Media World.
También fue acusado el guatemalteco Rafael Salguero, representante de la CONCACAF en el comité ejecutivo de la FIFA, aunque en Guatemala no hay acciones penales en su contra.