La fiscalía paraguaya anunció el viernes que enviará a las autoridades de Estados Unidos los documentos que incautó en un allanamiento en la sede de la Conmebol, incluyendo contratos relacionados con la Copa América y la Copa Libertadores.
Las autoridades allanaron el jueves la sede de la confederación sudamericana a solicitud de las autoridades de Estados Unidos, donde están acusados de recibir millonarios sobornos los tres últimos presidentes del organismo, al igual que otros dirigentes del fútbol latinoamericano y empresarios de marketing deportivo.
«Incautamos actas de reuniones y reglamentos, contratos desde 1991 hasta el 2015», dijo el viernes en conferencia de prensa el fiscal paraguayo Hernán Galeano. «El mello de la cuestión son los contratos entre la Conmebol y las empresas que tenían el marketing de la Copa Libertadores y la Copa América específicamente».
Galeano indicó que «no existe un plazo» para enviar los documentos a Estados Unidos.
En tanto, el fiscal Federico Espinoza señaló que los dos paraguayos ex presidentes de la Conmebol acusados en Estados Unidos, Nicolás Leoz y Juan Angel Napout, no serán procesados en Paraguay porque el código penal del país «no tipifica como hecho punible el soborno entre empresas privadas».
«Por eso no se puede abrir un expediente a los dirigentes de la Conmebol por presunto soborno ni lavado de dinero, porque para decir que hubo lavado el origen del dinero debe ser ilegítimo según la ley», indicó.
Agregó que el soborno sólo es castigado en el sector público.
Las oficinas de la Conmebol estuvieron protegidas desde 1997 y hasta el año pasado por inmunidad diplomática.
El congreso paraguayo revocó esa ley después de las primeras acusaciones de corrupción en mayo contra dos ex presidentes del organismo, el paraguayo Leoz y el uruguayo Eugenio Figueredo.
Leoz permanece bajo arresto domiciliario en Paraguay, donde aguarda extradición a Estados Unidos. Figueredo fue extraditado de Suiza a Uruguay, donde encara otros cargos por corrupción.
El último presidente, Napout, fue arrestado el 3 de diciembre en Zúrich, en una segunda ronda de acusaciones del gobierno estadounidense. El paraguayo, al igual que sus antecesores, está acusado de recibir millones de dólares en sobornos a cambio de los derechos comerciales de torneos de fútbol, entre ellos la Copa América.
Napout fue extraditado el 15 de diciembre a Estados Unidos, donde permanece en libertad bajo fianza. Mientras, la Conmebol quedó presidida de forma interina por el uruguayo Wilmar Valdez hasta las elecciones especiales del 26 de enero.
El abogado Cristóbal Cáceres, uno de los letrados contratados por Napout, dijo el jueves que «entregamos todas las documentaciones solicitadas por los fiscales, así como lo estamos haciendo desde hace seis meses».