La fecha más importante del año para Cristiano Ronaldo no tiene nada que ver con el clásico de Real Madrid contra Barcelona. Ni con los partidos cruciales en la Liga de Campeones. O representar a Portugal con la selección.
De acuerdo con Ronaldo, es cuando él aborda un avión privado para el viaje de enero a Zúrich para ver si será coronado el mejor jugador del año en la ceremonia del Balón de Oro de la FIFA.
«Es una tarjeta dentro de un sobre que pueda cambiar tantas cosas», dice Ronaldo en un nuevo documental sobre su vida que se estrenó el lunes en Londres.
«Es el clímax de un año de trabajo».
La obsesión de Cristiano con ganar el máximo trofeo individual del fútbol es un tema central en el documental de 92 minutos, que comienza con la gala del 2014 y cierra con el triunfo del 2015.
Lo que Cristiano prefiere no mencionar demasiado es el organismo rector responsable por el codiciado premio ni el presidente Joseph Blatter que se lo ha entregado tres veces.
Promoviendo la película en Londres el lunes, un moderador en una conferencia de prensa inicialmente trató de interrumpir una pregunta a Cristiano sobre la FIFA y lo que espera el astro portugués de la organización que rige el deporte, agobiada por escándalos.
Pero Cristiano, quizás sintiendo que estaba siendo visto como alguien débil, intervino rápidamente. «No le temo a nada… Voy a responder lo que pienso».
Pero no lo hizo.
«Por supuesto, no voy a hablar sobre eso porque cuando Cristiano dice algo eso arma gran ruido», dijo, refiriéndose a sí mismo en tercera persona. «No voy a involucrarme en ese tipo de problemas».
A más preguntas sobre por qué los jugadores parecen temer hablar sobre el estado actual de la FIFA, Cristiano no se mostró más revelador.
«¿Qué esperan que yo diga? Por supuesto que estoy triste por lo que pasó ayer», dijo, refiriéndose no a la FIFA sino a la primera derrota del Real Madrid en la temporada.
«No quiero pensar (en lo de ayer) porque hoy es un día muy especial para mí. Es uno de los días más importantes de mi vida».
Para Cristiano, tener el estreno de su película en la Plaza Leicester en Londres parece ser una ocasión a la par con la final de la Liga de Campeones y la gala del Balón de Oro.
La película, producida por el mismo equipo responsable por documentales sobre el astro de Fórmula Uno Ayrton Senna y la cantante Amy Winehouse, tiene momentos conmovedores, que muestran a Cristiano como padre atento, jugando con Cristiano Jr. en su casa en Madrid.
Recientes reportes de prensa son usados en el documental para resaltar el misterio que rodea la identidad de la madre del niño. Cristiano tiene custodia total de su hijo y dice que cuando este sea mayor «le diré lo que hice».
Cristiano Jr. es visto llevando una vida extremamente privada, sin relacionarse en cámara con otros niños. Su padre lleva una existencia similar.
«No tengo muchos amigos en el fútbol… la mayor parte del tiempo estoy solo», dice Cristiano. «Me considero una persona aislada… desconectada del mundo».
El cariño que demuestra Cristiano por su hijo contrasta con su infancia difícil, con un padre borracho que murió hace diez años por el alcohol.
«Quería ser un padre distinto», dice Ronaldo en un momento tierno de la película, en el que no está promocionando su figura.
LONDRES (AP)