?En el día inaugural de la temporada en el estadio de los Mets, los fanáticos no ocultaron su desdén hacia los dos torpederos del equipo cuando fueron presentados previo a un juego contra los Filis de Filadelfia. Rubén Tejada fue abucheado, mientras que Wilmer Flores recibió una mezcla de silbidos y tímidos aplausos.
Exactamente medio año después, en la primera postemporada del equipo de Nueva York desde 2006, los dos torpederos son los favoritos sentimentales de la afición.
Y eso quedó plasmado la noche del lunes, al ser presentados antes del arranque de la serie de playoffs contra los Dodgers de Los Ángeles. Fueron los más ovacionados.
Todo un giro con respecto al inicio de la campaña cuando ambos enfrentaban la resistencia de los fanáticos, que clamaban por otras alternativas como adquirir a Troy Tulowitzi o Starlin Castro.
Pero la gerencia de los Mets se mantuvo a rajatabla con su plan de tener al venezolano Flores como titular y al panameño Tejada en funciones de suplente.
Entre abril y octubre, los dos acabaron como protagonistas de momentos indelebles de la temporada de un equipo que desde 2008 no cuajaba un balance positivo en su récord y que acabó consagrándose campeón de la división Este de la Liga Nacional.
Flores fue el jugador captado cuando lloraba en medio de un juego contra San Diego en julio, luego que un fanático próximo a la cueva de los Mets le informó que había sido traspasado a los Cerveceros de Milwaukee. Pero el canje, que hubiera traído a Carlos Gómez a Nueva York, no fructificó y, dos días después, Flores sentenciaba un juego en el 12mo inning con un jonrón ante Washington, el equipo favorito de la división. Flores se había ganado los corazones de todos en Nueva York.
En el caso de Tejada, una dramática lesión en el segundo juego de la serie de los Dodgers le tiene como la figura de inspiración del equipo en octubre. Sí, el mismo jugador que había tenido que aguantarse numerosas críticas al tratar de asumir la titularidad luego que José Reyes se fue como agente libre al final de la campaña de 2011.
Los fanáticos acudieron al Citi Field con carteles que rezaban la leyenda «A Ganar por Rubén», con el rostro del infielder de 25 años.
Flores, de 24 años, reflexionó sobre las circunstancias en torno a ambos: «Esas cosas van a pasar, vas a estar abajo y arriba. Lo importante es quedarte en tu nivel y no llevarte por las reacciones de los fanáticos», dijo a The Associated Press. «Los fanáticos de nosotros nos tienen mucho respeto. Lo que hicieron con Rubén con ese saludo fue bastante especial para el equipo.
Tejada no ha dado declaraciones desde que sufrió la fractura de la pierna derecha tras la barrida de Chase Utley que le costó el resto de la temporada, pero antes de la serie habló sobre el curso final de la campaña, en la que acabó con la mayor responsabilidad en el puesto de campocorto.
«Independientemente de las situaciones, esté jugando él o esté jugando yo, no ha dañado en ninguna parte la amistad», señaló Tejada a The Associated Press. «Nosotros compartimos muchos, nos ayudamos mutuamente y eso es lo que nos ha ayudado como equipo».
Para los Mets, el final de cuentas, retener a Flores y Tejada resultó lo ideal.
A partir del 31 de julio, luego de su fallido canje, Flores bateó para .296 con seis jonrones y 19 impulsadas en 44 juegos. Acabó con 16 jonrones, ocho de los cuales empataron o dieron ventaja a los Mets.
Tejada tuvo promedio de .287 tras el Juego de Estrellas, luego de hacerlo para .237 antes de la pausa. Ostentó el séptimo mejor porcentaje al bate de la Nacional en septiembre, con .340 (17 hits en 54 turnos).
«Verdaderamente que ha sido una temporada de altibajo para los dos», reconoció el manager de los Mets Terry Collins. «En los entrenamientos de primavera empezamos inclinándonos con Wilmer Flores como nuestro torpedero. Como le dije a Rubén en la primavera, ‘te tiene que quitar el puesto’. Creo que cuando comenzó la temporada y Wilmer era el titular, Rubén se puso una consigna, ‘tengo que luchar por esto, este es mi trabajo’. Creo que decidió a superarse y lo logró».
«Ha sido una temporada peculiar», reconoció Flores