Expresidente de CONCACAF Jeffrey Webb se declara inocente

El expresidente de la CONCACAF Jeffrey Webb se declaró inocente en un caso de sobornos y corrupción que conmovió a las autoridades del fútbol internacional.

Webb formuló su declaración ante una jueza federal en la ciudad de Nueva York el sábado.

Webb no será el último acusado en el caso de corrupción masiva si los fiscales consiguen la extradición de otros seis dirigentes de la FIFA.

El expresidente de la confederación del fútbol de América del Norte, Central y el Caribe satisfizo un bono de fianza por valor de 10 millones de dólares ante la justicia federal. Entregó tres pasaportes: dos del Reino Unido y otro de las Islas Caimán, y como condición de su libertad bajo fianza deberá usar un dispositivo de vigilancia electrónica.

La fianza de Webb fue presentada por diez personas, entre ellas su esposa y los padres de esta, que estuvieron en la audiencia. Pusieron como fianza inmuebles, cuentas de retiro, automóviles y alhajas. El acusado se limitó a responder «Sí, su señoría» cuando la jueza le preguntó si comprendía los cargos.

El abogado defensor Edward O’Callaghan no formuló declaraciones ni tampoco los fiscales.

Webb, de 50 años, es uno de siete dirigentes de la FIFA que fueron detenidos en Suiza hace algunas semanas. Los fiscales sostienen que se confabularon para pagar sobornos e incentivos por más de 100 millones de dólares vinculados al otorgamiento de derechos de organización y de transmisión de la Copa Mundial y otros torneos durante un período de 24 años.

Después de la formulación de cargos, Webb fue suspendido provisionalmente y reemplazado como vicepresidente de la FIFA en representación de la CONCACAF. Webb también presidía la CONCACAF.

En total 14 hombres, nueve dirigentes del fútbol y cinco ejecutivos de mercadeo fueron acusados en mayo por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, incluso el exvicepresidente de la FIFA Jack Warner, quien se resiste a la extradición desde Trinidad-Tobago. Las revelaciones hicieron que el presidente de la FIFA Joseph Blatter renunciara días después de los arrestos.

Webb había prometido reformas cuando fue elegido en 2012 para suceder a Warner como presidente de la CONCACAF.

Durante el procedimiento judicial del sábado en Brooklyn se le ordenó a no tener contacto alguno con dirigentes de la FIFA, la CONCACAF o sus coacusados, y deberá permanecer en la zona metropolitana de Nueva York hasta su juicio.

El escándalo estalló en mayo cuando un exmiembro del comité ejecutivo de la FIFA, Chuck Blazer, se declaró culpable de soborno y evasión impositiva. Admitió haber participado con otros en un soborno por 10 millones de dólares en apoyo de la candidatura de Sudáfrica para organizar la Copa Mundial 2010.

Blazer coopera con la investigación. A cambio de ello, los fiscales dijeron que no recomendarán una sentencia específica.

Webb, originario de las Islas Caimán, también tiene una residencia en el estado de Georgia.

NUEVA YORK (AP)