Esta es la capital mundial del hule. Aquí fue donde se fabricaron los primeros neumáticos, el primer dirigible de Goodyear alzó vuelo y dos prodigios del básquetbol nacieron con cuatro años de diferencia en la década de los 80.
Este jueves dará inicio la final de la NBA, que será transmitida por TN8 a partir de las siete de la noche, con el staff deportivo compuesto por Levi Luna, Efrain Arias y Octavio Sevilla.
LeBron James y Stephen Curry, las dos grandes estrellas de la NBA que desde el jueves se citan en la serie por el campeonato, salieron de la misma ciudad. Uno es el hijo pródigo y el otro es el francotirador por excelencia de la liga.
James firmó como agente libre con los Cavaliers el año pasado, de vuelta a su primer equipo en la liga tras cuatro temporadas en Miami, para conseguir el título que la ciudad de Cleveland tanto anhela. Pero el destino le hará cruzarse contra Curry, su oponente de los Warriors de Golden State, que vuelve a su lugar de nacimiento.
«Tiene algo de ironía que vuelva a Cleveland, donde nació, para intentar salir campeón», dijo su padre, Dell Curry.
Wardell Stephen Curry nació el 14 de marzo de 1988, un día que su padre canjeado de Utah a Cleveland previo a su segunda temporada en la NBA disputaba un partido en el Madison Square Garden contra los Knicks de Nueva York.
Curry llegó al mundo con la misma velocidad con la que se desmarca para lanzar un triple. Su madre, Sonya, contó que su alumbramiento tomó apenas 2 horas y media, o sea lo que demora un partido. A las dos semanas, llevó al bebé a su primer partido de la NBA y que, desde el momento que se acercó al tabloncillo, sabía que ella y su esposa habían concebido a un jugador nato.
«Estaba dormido», dijo la semana pasada, luego que los Warriors ganaron el título de la Conferencia del Oeste para alcanzar su primera final de la liga en 40 años. «Entramos a la cancha y de inmediato abrió los ojos. Los tuvo abiertos durante todo el partido todo el partido. Luego, cuando entramos a la sala de familiares, se puso a dormir».
La familia Curry no pasó mucho tiempo en Ohio. Dell fue seleccionado por los Hornets de Charlotte en el draft de expansión y debieron mudarse otra vez.
Hasta que se fue a Miami en 2010, Akron fue la única ciudad donde James residió, el sitio donde irrumpió como estrella en la escuela secundaria. Guarda un orgullo inmenso por su ciudad. James tiene tatuado ‘Akron’ en su hombro derecho y ‘Est. 1984’ (su año de nacimiento) en el izquierdo.
Akron nunca ha sido tema de conversación entre James, cuatro veces ganador del premio al Jugador Más Valioso de la liga, y Curry, el flamante ganador del galardón.
«Nunca lo hemos hecho», dijo James. «Y no creo que podremos hacerlo con lo que se viene».
James admira a Curry, desde que el armador de los Warriors se hizo notar en la universidad de Davidson. James vio jugar a Curry varias veces y hasta viajó a Detroit para verlo en un partido por el campeonato nacional. James dice que de inmediato supo Curry iba a ser una estrella.
«Me pareció que un jugador distinto», dijo James. «Soy muy bueno para fijarme en el talento y me pareció que era alguien distinto».
James destaca que Curry combine sutileza, habilidad y energía en su juego.
«Es una máquina», dijo James. «Es incansable. Su habilidad para manejar el balón, para disparar en movimiento. Es asombroso», dijo James. «No creo que exista alguien en la liga que tire como él lo hace».
Los chicos de Akron se conocen, pero no son amigos entrañables. Curry fue huésped en la casa de James, pero no conoce muy bien su ciudad natal. Pero comparten un lazo único.
«Es lindo tener eso en común», dijo Curry. «Pero él tiene más arraigo con la ciudad que yo. Hace como tres o cuatro años fui a su casa en Akron y pasé un rato. Más allá de eso, yo nací en Akron, pero me criaron en Charlotte. Hasta ahí llega la cosa».
James no escatima elogios sobre Curry, un jugador que es señalado para convertirse en el rostro de la liga. La conquista de un campeonato apurará el ascenso de Curry a ese pedestal.
Quizás porque Curry nació en Akron, James se ha empeñado en ayudar a su colega de 27 años.
«He tenido la oportunidad de conversar con él un par de veces en la cancha. Solamente sobre el proceso de convertirse en una gran jugador, ser un líder y cumplir con lo que se necesita para llegar hasta este punto», dijo James. «No sé si aprovechó los consejos, pero la ha ido muy bien. Tiene una linda familia. Está rodeado de gente muy buena, así que no necesita nada de mí».
AKRON, Ohio, EE.UU. (AP)