Sobrevivientes y familiares de las víctimas recuerdan el 30mo aniversario de la tragedia del estadio de Heysel de Bruselas, donde 39 personas murieron por culpa de la violencia entre aficionados en la final de la Copa de Europa de 1985 entre el Liverpool y la Juventus.
Con un soplo de corneta el viernes por la mañana, coronas de flores fueron colocadas sobre una placa de recuerdo en el estadio Rey Balduino, que fue renovado y renombrado después de la tragedia.
Previo a la final, hooligans de una de las gradas que sostenía a los aficionados del Liverpool irrumpieron en una sección adyacente donde se ubicaban los seguidores de la Juventus. En medio del caos resultante, las víctimas fueron pisoteadas o sofocadas hasta la muerte, mientras trataban de escapar a la violencia. Otros murieron cuando se derrumbó un muro de contención.
El partido no se suspendió, en polémica decisión, y la Juventus ganó 1-0.
Juventus también oficiará un servicio de conmemoración en Turín.
BRUSELAS, Bélgica (AP)