Dos goles, obra de Modric y Cristiano Ronaldo, que batió con nueve el
récord de tantos marcados en una fase de grupos de la UEFA Champions
League, le bastaron al Real Madrid para acabar con la racha del
Copenhague en el Parken.
Puede que el equipo danés sea modesto, pero en su campo, en fase de
grupos, no había aún perdido en ocho partidos, y eso que habían
pasado Barcelona, Juventus y Manchester United, entre otros.
Fue un triunfo convincente del Madrid, que ya primero y clasificado
para octavos, quiso cerrar una brillante fase con una nueva victoria,
certificada sobre todo en un notable primer tiempo.
Apostó de inicio Ancelotti por Modric en vez de Illarramendi como
compañero de Xabi Alonso, que regresaba al equipo al igual que Bale y
Ronaldo. Y le salió bien la jugada.