El ex delantero de la selección italiana Antonio Cassano, que rescindió en enero su contrato con el Parma, dice que echa de menos el fútbol desesperadamente.
«Me pongo enfermo sin fútbol», dijo el jugador de 32 años al semanario italiano ‘Chi’. «Lo echo de menos a muerte».
«Extraño el ambiente en el vestuario, el entrenamiento, bromear con mis compañeros. Pero, por encima de todo, echo de menos la adrenalina (de los partidos)».
El ex atacante de Roma, Real Madrid, Sampdoria, Inter de Milán y Bari participó en 19 partidos para el Parma esta temporada, marcando cinco goles.
«Aún querría jugar, pero me veo como director deportivo en el futuro, como alguien que trata directamente con los jugadores», dijo Cassano. «Sé que no podrían engañarme, porque me sé todos los trucos».
La indisciplina fue una pesada carga para Cassano a lo largo de su carrera y el atacante nunca terminó de cumplir las expectativas que creó cuando debutó con el Bari a los 17 años, marcando un gol brillante para derrotar al Inter en los minutos finales de un partido de la serie A.
Sus mejores años los pasó en la Roma, donde marcó 18 goles en la temporada 2003-2004.
«Nunca me he divertido tanto jugando al fútbol como con Francesco (Totti)», dijo Cassano del capitán de la Roma.
Los constantes conflictos con la directiva obligaron a la Roma a traspasarle al Real Madrid en 2009.
«No creo que haya otro Cassano en el futuro», dijo el delantero, que jugó en 39 ocasiones con Italia y anotó 10 goles.
MILÁN (Reuters)