El conductor acababa de pagar 1,5 millones de dólares por uno de los 499 modelos fabricados de LaFerrari. Pero no tuvo mucha habilidad para controlarla cuando la aceleró en una calle de Budapest, Hungría.
Un joven conducía su modesto automóvil cuando vio adelante suyo uno de los vehículos más preciados y exclusivos del planeta, un LaFerrari. Cuando sacó su teléfono y empezó a filmar, nunca imaginó lo que registraría su cámara.
Sólo unos segundos después del comienzo de la filmación, el conductor del auto deportivo quiso acelerar, perdió el control y chocó contra tres vehículos que estaban aparcados al costado del camino.
Nadie salió herido, salvo el orgullo del piloto. Inmediatamente, se bajó y retiró las placas, a sabiendas de que lo identificarían muy rápidamente una vez que se viralicen los videos de la gente, que había empezado a filmar.
Éste es el cuarto accidente que involucra a un LaFerrari desde que el modelo salió a la venta, en 2014. El primero se había registrado en Mónaco, el segundo en China y el cuatro en Francia.