Nicaragua conmemora hoy el primer centenario de la muerte del poeta Rubén Darío, iniciador del movimiento modernista en la literatura hispánica, y entre las acciones destaca una sesión solemne del Parlamento en la catedral de León.
En ese propio templo, donde la noche del viernes le rindió honores el presidente de la República, Daniel Ortega, yacen los restos del bardo, quien había nacido en la villa de Metapa, Ciudad Darío desde 1920, el 18 de enero de 1867.
El mandatario dijo que hoy más que nunca Nicaragua necesita de la fuerza espiritual de Darío y comparó esa fortaleza con el fuego de los volcanes de la geografía nacional y el de las raíces indígenas, que forjaron una identidad propia al unirse a las del pueblo español.
Esta semana la Asamblea Nacional discutió en su comisión permanente de Cultura la iniciativa de ley que propone la declaración de Darío como Héroe Nacional.
El propio Parlamento ha organizado en su sede desde mediados de enero una serie de conferencias a cargo de estudiosos de la obra del llamado Príncipe de las Letras Castellanas.
Diversas acciones culturales conmemorativas en la ciudad de León, considerada la capital intelectual de esta nación centroamericana, y en el central departamento de Matagalpa, asiento de Ciudad Darío, tendrán lugar durante todo el fin de semana.
La representación de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA), encabezada por el embajador Dennis Moncada, fue anfitriona este jueves de un agasajo continental al autor de Azul, por esa institución hemisférica.