Varias personas resultaron heridas este martes cuando un kamikaze conduciendo un coche se hizo estallar en la entrada de la embajada de China en Biskek, la capital de Kirguistán, una exrepública soviética de Asia Central, anunció la policía.
«Sólo murió el kamikaze y varios guardias resultaron heridos», indicó a la prensa el viceprimer ministro Jenish Razakov.
Una fuente de la policía en Biskek indicó a la AFP que el coche, un Mitsubishi Delica, se abalanzó contra una de las rejas de la embajada y estalló dentro del complejo, cerca de la residencia del embajador.
Otra fuente de los servicios de seguridad indicó que el vehículo contenía un «artefacto explosivo».
Según la prensa local, el conductor del coche murió y resultaron levemente heridos dos kirguisos que trabajan para la embajada así como una mujer.
Varios habitantes de Biskek explicaron a la AFP que la onda expansiva de la explosión hizo temblar sus casas y rompió cristales.
El personal de la embajada de China y el de la de Estados Unidos, muy cercana, fue evacuado, indicaron los servicios de urgencia kirguisos.