Un paquistaní apuñaló a 17 mujeres en el lapso de unos meses en las calles de la ciudad de Rawalpindi (norte de Pakistán), matando a una, para «vengarse» de una madrastra cruel, anunció la policía el viernes.
Desde finales de enero, Mohamad Ali, de 22 años, atacaba indiscriminadamente a mujeres con las que se cruzaba en la calle, hasta que fue arrestado en agosto, dijo a la AFP Malik Zulfiqar Hussain, un agente encargado de la investigación.
«Dijo a la policía ‘odio a las mujeres, quería vengarme‘», indicó Hussain.
«Confesó haber herido a 17 mujeres» con un cuchillo de cocina, agregó el policía. «Una de ellas, una enfermera, murió esta semana».
El agresor dijo que tras la muerte de su madre, cuando era un niño, su padre se casó con una mujer que lo maltrataba.
Fue acusado de asesinato e intento de asesinato, indicó la policía.
Pakistán es un país profundamente conservador y patriarcal, en donde las mujeres son a menudo asesinadas por familiares bajo pretexto de que «deshonraron» a la familia.
