En el barrio Santa Rosa, en el Distrito I de Managua, la mayoría de sus habitantes abrieron las puertas de sus casas para permitir la fumigación que realizan las brigadas médicas del Ministerio de Salud contra vectores transmisores de virus.
Ángel Alvarado, técnico en control de vectores, indicó que serían 1,000 casas las que se fumigarían y ha sido constante porque pasan cada ocho días para prevenir la proliferación de zancudos.
Doña Damaris Cerrano, habitante de este barrio capitalino, dijo que ella abre siempre las puertas de su casa porque a cada rato se reproducen zancudos que al picarlos les dejan grandes ronchas, aunque manifestó que no han tenido problemas con enfermedades pero previenen permitiendo la fumigación.