Los británicos han votado a favor de salirse de la Unión Europea, de acuerdo a los resultados finales que le dieron el triunfo al Brexit por 52 por ciento contra 48 por ciento por la permanencia. Esto quiere decir que en los próximos días líderes de Gran Bretaña y de Europa negociarán los términos para la salida.
La salida ya afectó la economía británica con una caída histórica de su moneda ante el dólar, lo cual, de acuerdo a los políticos que hicieron campaña a favor de abandonar el bloque europeo dijeron beneficiará las exportaciones del país y, por consecuencia la economía.
Esto, sin embargo, no es tan claramente predecible, ya que las consecuencias reales tomarán años en verse, de acuerdo a expertos. La inmigración también se verá afectada, entre muchas otras cosas.No obstante, este referendo es una elección general y los resultados de las diferentes áreas no cuentan sino el número total de votos emitidos.
Esta es la primera vez que un país miembro de la UE abandona esta unión política y económica, por lo que los mecanismos para ejecutar la medida por el momento no son muy claras ni definidas. Tras este referendo se esconden antiguas y nuevas tensiones: el recelo por la burocracia de Bruselas, el control de la inmigración, la defensa de la soberanía nacional, el orgullo por un carácter británico insular y diferenciado del resto de Europa y los retos de seguridad.